Luego de casi 20 días de haber sido designados por una mayoría parlamentaria afín al Gobierno, los 31 magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) no han logrado realizar las designaciones que les corresponde y que permiten el normal funcionamiento del Tribunal.

Hasta el pasado martes 21 de diciembre, cuando se realizó la última sesión ordinaria, antes de la vacancia judicial que termina el 6 de enero, los magistrados dejaron pendiente la designación de los tres vocales del Consejo Nacional de la Judicatura (CNJ).

También falta elegir seis conjueces de un total de 29 que tiene el pleno. En reuniones anteriores se designó a 23.
Asimismo, está vacante el puesto de secretario de la CSJ que antes lo ocupaba Fernando Ortiz Bonilla, nombrado como actual magistrado de la Primera Sala Civil.

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Como consecuencia de la decisión del Congreso Nacional, que el pasado 8 de diciembre cesó a la antigua Corte, el director de Projusticia, Gustavo Jalkh, renunció a su cargo y aún no se define su reemplazo. Projusticia impulsa un proyecto de modernización de la justicia ecuatoriana con el respaldo económico de 10 millones de dólares del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

De las diez salas especializadas del Tribunal, siete cumplieron con el requisito de elegir al presidente de esos órganos judiciales; faltan tres de esas autoridades para las salas Segunda de lo Penal, Segunda de lo Civil y Fiscal.

Jorge Fantoni Camba fue designado presidente de la Primera Sala Penal; Carlos Pozo Montesdeoca, de la Primera Sala Civil; Efrén Gavilanes, de la Tercera Sala Civil; Darwin Muñoz, de la Primera Sala de lo Laboral; Oswaldo Toledo, de la Segunda Sala de lo Laboral; Luis Cueva Carrión, de la Tercera Sala Laboral; y Ernesto Velásquez, de la Sala de lo Contencioso Administrativo.