Dos operativos realizados esta mañana por los miembros del Cuerpo de Bomberos de Guayaquil (CBG), dejaron al descubierto la última novedad en petardos de alta peligrosidad, al que los uniformados denominaron “tumbacuadra”.

El primer operativo se realizó en las calles 19 y la E, suburbio de Guayaquil, en una casa de construcción mixta, de propiedad de Elizabeth Aguilera.

“Encontramos dentro de la cajuela de un vehículo gran cantidad de pólvora. Es impresionante la irresponsabilidad de las personas que fabrican este tipo de “juegos”. No piensan en su familia ni en las personas que los rodean”, manifestó Eduardo Crespo, jefe del operativo.

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Crespo aseguró que el poder explosivo de la pólvora acumulada en grandes petardos puede destruir una cuadra y causar grandes daños. Por esa razón, dijo, se solicitará al Ejército que realice una investigación para conocer cuál es la procedencia del material.

Cerca del lugar donde se decomisó el material se encuentra una escuela y un local de venta de gas.

El segundo operativo se lo realizó en las calles 42 y la O y se decomisó pólvora, papeles de  envoltura y un saco de camaretas.

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Los miembros de casaca roja sancionaron a los propietarios de las viviendas, retirando el medidor de energía eléctrica. Además, advirtieron que se procederá a la detención de todas aquellas personas que fabriquen este tipo de explosivos, mientras que el material que se decomise será destruido en los próximos días.