Miami Heat derrotó a los Lakers 104-102, en tiempo extra, en la NBA.
Pocas veces un partido de temporada regular en la NBA generó tanta expectativa como el choque entre Miami y los Lakers el día de Navidad.
Cuando terminó, la impresión generalizada fue que la pulseada entre Shaq y Kobe no defraudó.
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El astro Kobe Bryant se desbordó el sábado con 42 puntos, pero su ex compañero Shaquille O’Neal se llevó las palmas colectivas al vencer con su nuevo equipo, Miami Heat, a los Lakers de Los Ángeles con marcador 104-102 en tiempo extra, en el segundo y último partido de la jornada.
O’Neal, un ex integrante de los Lakers hasta la campaña anterior, fue recibido con una gran ovación de los espectadores que se dieron cita para presenciar el esperado duelo.
A pesar del alto marcador personal, Bryant perdió inexplicablemente un disparo de tres puntos en los segundos finales del tiempo adicional.
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Esta fue la undécima victoria consecutiva de Miami, que empató así el récord impuesto por el equipo entre el 27 de enero y el 20 de febrero de 1997.
Ovacionado
O’Neal se encumbró con 24 puntos y 11 rebotes, mientras que su compañero el escolta Dwyane Wade anotó 29 y generó 10 asistencias.
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Wade logró cuatro de sus tantos en el tiempo extra, incluido un enceste en el área de la pintura con 2 minutos y 8 segundos para finalizar el encuentro que puso pizarra de 104-99 a su favor.
O’Neal, quien fue ovacionado constantemente durante el partido, agregó tres bloqueos a su actuación en el primer desafío de la temporada contra su antiguo conjunto, al que ayudó a ganar tres títulos de la NBA en los últimos años antes de ser canjeado al quinteto de Miami.
Antes del partido, O’Neal y Bryant tuvieron un frío encuentro en la mitad de la cancha. Tras el partido, Shaquille O’Neal evitó mencionar el nombre de Bryant, como ha sido su costumbre estos últimos meses.
Cuando le preguntaron si había hecho las paces con el astro de los Lakers, O’Neal replicó: “Solo vinimos a ganar”.
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Sobre si echaba de menos a Los Ángeles, O’Neal enumeró a la policía, la gente, los centros comerciales, las luminarias de Hollywood, pero seguido señaló que “no extraño el tráfico y tampoco a dos o tres individuos”.
Se le preguntó quiénes eran esos individuos, pero el pivote de Miami señaló: “No sé. No conozco sus nombres. Sus nombres han sido borrados de mi memoria. Si lo hago, me traumatizo”.
Sobre la reacción de los espectadores indicó: “Creo que el 89,2% aplaudió y el 11,8% rechifló”, dijo el jugador sacando mal la cuenta. “Pero ya estoy acostumbrado. Fue un día divertido. Seguro que la NBA hizo mucho dinero”.
En otro resultado, Pistons de Detroit ganó a los Pacers de Indiana 98-93.