Con casi dos horas de retraso el presidente de la República, coronel Lucio Gutiérrez, llegó ayer a la parroquia de Iluman, a 10 minutos de Otavalo (Imbabura), para colocar la primera piedra de un proyecto de agua potable y participar como padrino de una ceremonia navideña.

Desde las 08h00 de ayer 18 comunidades se concentraron en el estadio de Iluman para recibirlo y agradecerle su apoyo al proyecto regional de agua Pesillo-Imbabura.

Durante el acto, una a una desfilaron las comunas con su regalo para el Mandatario, desde un pequeño borrego hasta dos atados de gallina.

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Al evento asistieron aproximadamente tres mil personas y tuvieron el resguardo de 200 policías y 250 militares.

También asistieron al evento el ministro de Defensa, Nelson Herrera; el secretario de la Presidencia, Carlos Pólit; el secretario de Comunicación, Iván Oña; el gobernador de Imbabura, el teniente coronel Fernando Avilés, y el alcalde de Ibarra, Gustavo Pareja (Prian).

La comunidad de Iluman le hizo una limpia con 18 curanderos. Luego, Gutiérrez participó de una misa por la Navidad y posteriormente colocó la primera piedra.

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Durante su discurso, el Mandatario, quien no dio declaraciones a la prensa, aseguró que su relación con las comunidades indígenas será “indisoluble”, y reiteró su lucha contra la oposición.

“Aquí se respira aire de pueblo, transparencia, aquí no está la oligarquía, aquí está el pueblo que tiene sus manos llenas de callos por el trabajo honrado, productivo, no como la oligarquía que tiene las manos llenas de callos por contar billetes robados al pueblo ecuatoriano y que ahora este gobierno les va a cobrar”, dijo Gutiérrez.

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Esta es la segunda vez en la semana que el Jefe de Estado se refiere a la oligarquía corrupta en sus discursos. El lunes pasado lo hizo en Salinas.