Jaime Nebot Saadi, alcalde de la ciudad, ratificó esta mañana que en enero se realizará una marcha para demandar del Gobierno seguridad y salud. Esta medida fue tomada luego de que el Consejo Directivo del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) anunciara ayer la nulidad del convenio suscrito el 16 de diciembre con el Municipio de Guayaquil, para el equipamiento de cuatro dispensarios médicos.

Dicho acuerdo, que forma parte del convenio general que suscribieron las dos entidades el 21 de junio pasado, contempla el equipamiento de cuatro hospitales y dispensarios de salud del seguro social, por 1’950.000 dólares, de los cuales 750 mil serán asumidos por el cabildo. Por ello Nebot espera que dicha nulidad sea problema interno de exceso de atribuciones por parte del director del IESS, y se solucione pronto.

En entrevista con Citynoticias (89.3 FM de Guayaquil), Nebot informó que la transformación de los dispensarios del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social en hospitales del día será realidad en el primer semestre del 2005.

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Aunque en el organismo los criterios sobre el tema están divididos, esto abre un nuevo debate entre las relaciones de la Alcaldía de Guayaquil con el Ejecutivo, pues, precisamente Jorge Mogollón, representante del presidente de la República, coronel Lucio Gutiérrez, en el Consejo, expresó ayer que el convenio es nulo, debido a que excede el monto permitido por el presupuesto del IESS ($ 280 mil) para la firma de acuerdos de cooperación.

Mogollón señaló que el ex director encargado, Nicolás Vivar, cometió un error al suscribir un convenio por 900 mil dólares con el cabildo guayaquileño debido a que, afirma, el IESS no cuenta con suficiente capital.

Nebot aseguró que las declaraciones realizadas por el ex director, Nicolás Vivar, acerca de que fue un mal momento político para firmar el convenio, son totalmente absurdas, porque “la seguridad y salud de la ciudadanía no tienen que estar a la espera de las buenas relaciones entre los políticos del país”.

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“Nosotros estamos para servir y diferenciar las cosas. Primeramente perjudicaron la seguridad y ahora quieren perjudicar la salud. Mi relación con el Presidente es estrictamente de alcalde y Primer Mandatario. No creo que el capricho de ciertos funcionarios deba afectar a los guayaquileños”, manifestó Nebot.

Finalmente, reiteró que si hasta el 15 de enero no se restablece la seguridad privada en la ciudad, los guayaquileños saldrán a las calles para reclamar al régimen la atención que merece la ciudad.