El invitado especial de la fiesta navideña que realizó ayer la fundación Es justo y necesario fue el niño Jesús.

Los 72 pequeños, que se benefician de la educación primaria y becas secundarias que se imparten en la fundación, dedicaron sus villancicos y lecturas al hijo de Dios. Le gritaron vivas y reflexionaron sobre el significado de esta festividad religiosa.

En la festividad un grupo de alumnos del primer módulo (que incluye a quienes reciben educación de primero y segundo grado) leyó un texto sobre el pensamiento de Jesús.

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Bryan Villamar dijo, simulando que era Jesús: “En mi fiesta había globos, regalos; pero sabes una cosa ni siquiera me invitaron... Se me ocurrió entrar a la celebración sin hacer ruido y me quedé en un rincón”.

Gilson Chiquito continuó con la lectura: “Apareció un señor gordo que parecía se había tomado unos tragos de más, diciendo Jo, jo, jo, y los niños corrieron a abrazarlo y a mí nadie me abrazó... Voy a organizar mi propia fiesta y quisiera que tú seas mi invitado especial y me dejaras entrar a tu vida”.

Mientras concluía el mensaje, los niños y padres de familia aplaudieron y gritaron “Te queremos Jesús”. Luego cantaron el tema Marinero.

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Los menores del tercer módulo, que equivale al séptimo año de educación básica, cantaron el tema Gracias y sostenían en las manos una vela roja encendida.

El siguiente acto lo condujo el padre Faustino Ruiz, párroco de la iglesia San Antonio María Claret, quien convocó a los asistentes a celebrar una Navidad llena de amor.

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Después de este mensaje, hubo niñas como Mariuxi Gutiérrez, de 8 años, quien abrazó a su madre, María Rivera, y pidió, en silencio, que “en esta Navidad mi mami consiga trabajo, ya que a veces lava la ropa y gana algo de dinero, pero otras veces no”.

Al final de la fiesta, los miembros del directorio de la fundación les ofrecieron un almuerzo y entregaron juguetes y canastas navideñas a las familias.