Más de un millón de refugiados están en peligro inminente de pasar hambre o sufrir malnutrición el próximo año debido al posible recorte de la ayuda que ofrece el Programa Mundial de Alimentos (PMA), que afronta problemas para cubrir el costo financiero de sus operaciones humanitarias.
 
La advertencia fue lanzada este martes por un portavoz de la Alta Comisaría de la ONU para los Refugiados (Acnur), institución que se encarga de brindar asistencia a quienes han huido de sus países por razones de persecución, violencia interna o catástrofes naturales.
 
Ron Redmond, portavoz de esa agencia de la ONU, recordó que cientos de miles de refugiados en el mundo ya tienen que luchar día tras día para sobrevivir y que su situación podría empeorar aún si el PMA se ve forzado a reducir las raciones alimentarias que distribuye.
 
La solución inmediata -indicó- es que los países donantes respondan a las recientes peticiones de fondos del PMA.
 
La situación más grave se registra en Africa, donde en varios países las citadas raciones ya han sido reducidas drásticamente ante la falta de dinero para cubrir las necesidades de los refugiados.
 
Así, en Zambia se ha recortado a la mitad en los últimos dos meses la distribución de cereales y legumbres, que ahora sólo reciben 87.000 refugiados de un total de 191.000, precisó el portavoz.
 
"Hemos recibido información de refugiadas que han caído en la prostitución para alimentar a sus hijos, así como de niños que abandonan las escuelas para ayudar a sus familias a encontrar comida", relató Redmond.
 
Además, dijo, muchos refugiados están pidiendo autorización para salir de sus campamentos a diario y buscar trabajo en las zonas aledañas.
 
Igualmente, en Tanzania se redujo en 25% las raciones de legumbres y maíz que recibían los habitantes burundeses y congoleses de trece campamentos, para quienes esos productos constituían los elementos principales de su dieta.
 
Asimismo, "la malnutrición amenaza a 118.000 refugiados en Etiopía y 224.000 en Kenia, donde se realizarán recortes en la ayuda a menos que haya una donación inmediata en dinero o en productos alimenticios", declaró Redmond.
 
El problema toca también a países de otras regiones, como Azerbaiyán, donde 140.000 desplazados internos podrían enfrentar un recorte completo de alimentos en 2005 tras la disminución a la mitad decidida el mes pasado.