En medio de la frustración, 79 ecuatorianos arribaron a las 14h00 de ayer al aeropuerto Simón Bolívar de esta ciudad procedentes de Guatemala, tras ser detenidos el pasado mes de noviembre por las autoridades de ese país al intentar viajar ilegalmente a Estados Unidos.

En total, 48 hombres, 27 mujeres y 4 menores llegaron a la ciudad en un vuelo chárter de la compañía Tikal Jets. Los emigrantes habían salido en una embarcación desde El Oro que capturada en aguas guatemaltecas. En ese país permanecen 14 ecuatorianos, supuestos tripulantes, acusados de coyotaje.

En un vuelo chárter de la compañía Tikal Jets llegaron a las 14h00 de ayer los 79 ciudadanos ecuatorianos que intentaron ingresar ilegalmente a Estados Unidos y que fueron detenidos en aguas guatemaltecas por las autoridades de ese país el pasado 5 de noviembre.

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Los compatriotas salieron en una embarcación desde la provincia de El Oro, según Luis Guamán, uno de los viajeros oriundo de Cuenca, aunque no recordó la fecha en que zarparon ni el nombre del barco. Junto con los emigrantes iban 14 tripulantes, quienes están detenidos en Guatemala.

En total, 48 hombres, 27 mujeres y 4 menores de edad componían el grupo de emigrantes, quienes pagaron a los coyotes entre dos mil y cinco mil dólares por el viaje.

Como ocurre en estos casos, los deportados no ofrecieron mayor información sobre los coyotes, “yo no los conozco, por una pariente pagué 100 dólares y el resto tenía que pagar cuando llegue a Estados Unidos”, afirmó María Rosa Yupa Loja, proveniente de Cañar, quien por el viaje debía cancelar 5 mil dólares.

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El subsecretario de Asuntos Migratorios de la Cancillería, Héctor Hugo Falconí, dijo que los restantes 14 ecuatorianos están en Guatemala a órdenes de las autoridades,  porque están acusados de coyotaje, que es penado en ese país.

Recalcó que la legislación ecuatoriana tiene un vacío legal para poder castigar el coyotaje y que es necesario que el Congreso tramite la reforma al Código Penal.
Afirmó que el Ministerio de Relaciones Exteriores no tiene recursos para repatriación y hospedaje de los emigrantes;  se financia con gobiernos amigos y organismos humanitarios.