El presidente de Ecuador, Lucio Gutiérrez, aseguró este viernes que sus opositores pertenecientes a "la oligarquía corrupta" lo matarían si pudieran debido a que los está "desalojando de las instituciones del Estado, que han manejado como si fueran su hacienda".
 
"Estoy seguro de que no dudarían en hacerlo, y más cuando deje la Presidencia de la República", señaló Gutiérrez en un encuentro con representantes de medios de comunicación internacionales.
 
"No me han dejado un día de gobierno en paz, pateándome constantemente las canillas, pero yo pienso que la vida es un reto y me gustan los desafíos porque las fuerzas del mal jamás vencerán a las del bien", afirmó.
 
Gutiérrez reiteró su intención de convocar un referéndum sobre un proyecto de reformas políticas orientado a "poner fin a la hegemonía de esa oligarquía que ha saqueado al país y mantiene deudas con las arcas públicas de 110 millones de dólares".
 
"Esa es la razón -agregó- de que esas personas de doble moral me hayan declarado la guerra y traten de sacarme de la Presidencia con perversidad y malicia, pues se desesperan al ver cómo pierden sus privilegios y van a tener que pagar sus deudas con el Estado".
 
El Presidente ecuatoriano precisó que su proyecto de reforma política estará listo en el primer trimestre del próximo año para que lo vote el Congreso, y que después será sometido a una consulta popular, que, según afirmó, está seguro de ganar.
 
Explicó que su proyecto incluirá la designación del Vicepresidente de la República por parte del presidente y la disminución del número de diputados del Parlamento ecuatoriano, compuesto actualmente de cien escaños.

Oposición
 
Gutiérrez rechazó las acusaciones del líder del Partido Social Cristiano (PSC), el ex presidente León Febres-Cordero, en el sentido de que las recientes reestructuraciones de instituciones del Estado han sido realizadas para "establecer una dictadura en el país".
 
En las últimas semanas ambos políticos se han enzarzado en una batalla dialéctica, con intercambios de acusaciones de corrupción y deshonestidad, e incluso de vinculaciones con el narcotráfico.
 
"Vamos a escarbar a fondo en las cuentas y documentos y es muy probable que salten cosas muy oscuras de la familia Febres-Cordero, acostumbrada a enriquecerse a expensas de los recursos del pueblo ecuatoriano", anunció.
 
"Las reformas de la Corte Suprema de Justicia, del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo Electoral se han efectuado con respeto absoluto a las normas constitucionales, y los que dicen lo contrario es porque han perdido su dominio de esas instituciones", dijo Gutiérrez.
 
Afirmó además que la actual situación política del país "no es la más deseable", pero opinó que no cree que afecte a los créditos internacionales ni a la inversión procedente del exterior.
 
En ese sentido, destacó que "la economía del país está ahora estabilizada, con una inflación del 2 por ciento, un crecimiento anual de entre el 3,5 y el 4,5 por ciento y el descenso constante de las tasas de interés".
 
Subrayó también que "el año próximo será incluso mejor, ya que habrá subidas generalizadas de los sueldos, se incrementarán las inversiones en grandes obras públicas e infraestructuras y se suprimirán 5.000 empleos del sector público".