El Cuerpo de Bomberos junto con los policías metropolitanos y las Fuerzas Armadas realizaron ayer un operativo para decomisar petardos de fabricación clandestina.

El recorrido estuvo presidido por Luis Eduardo Crespo, jefe de brigada del Cuerpo de Bomberos. Incluyó cinco viviendas que fueron denunciadas por la ciudadanía.

En una casa ubicada en la 30 y Capitán Nájera se descubrieron cuatro sacos con camaretas, que fueron decomisados.

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No hubo detenidos, pues el dueño del inmueble no se encontraba en el lugar.
Ucles Cornejo, abogado municipal, colocó el sello de clausura a la vivienda.
El material requisado será destruido la semana próxima junto con lo acumulado de operativos anteriores.

Otra clausura se produjo en Tulcán y Callejón Parra, pese a que no se pudo comprobar la existencia de explosivos, pero sí un bar, donde se venden bebidas alcohólicas.

Cornejo indicó que si los propietarios de la casa tienen permisos municipales para la venta de bebidas alcohólicas la clausura se suspenderá.

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Crespo indicó que todo material clandestino o de fabricación casera será decomisado, los vendedores en sitios no permitidos, sin las precauciones pertinentes, irán presos y la multa a cancelar será de dos salarios mínimos vitales.