La Asociación de Magistrados de Chile  consideró ayer  que muchos jueces pudieron evitar las violaciones a los  derechos humanos durante la dictadura del general Augusto Pinochet y valoró el  informe de la Comisión de la Tortura que investigó a 35.000 víctimas de  tormentos.

Si bien hubo algunos jueces que tuvieron un accionar digno, corriendo el  riesgo de perder sus vidas y sus carreras, otros no prestaron la atención  debida a las denuncias, señaló el presidente del organismo y ministro de la  Corte de Apelaciones de Concepción, Diego Simpertigue.