Al parecer, la falta de un estudio geológico y construcciones inapropiadas provocaron los daños en la zona.
 
El pasado 5 de noviembre Mariana de Jesús Ávila (45) regresó de los Estados Unidos luego de haber intentado conseguir trabajo por cinco meses sin éxito; su frustración se incrementó cuando al retornar encontró su casa cuarteada y a punto de caer. 

Hace ocho años varias grietas aparecieron en su vivienda ubicada en la ciudadela Los Trigales (noroccidente de esta ciudad), cuando intentó levantar el segundo piso; pero con el paso de los años las fisuras se ensancharon.

Ahora, una gran grieta separa las gradas de ingreso a su inmueble con la puerta de entrada, otra atraviesa la pared de la sala y la más grande se encuentra en el muro de tres metros en el patio donde pensaba construir un cuarto para su madre.

Inundación
A estos problemas se agrega que el pasado 1 de diciembre, cuando una tormenta eléctrica y granizada cayó sobre la ciudad, su familia enfrentó una inundación de la casa y la sedimentación de lodo en la parte trasera. “Ahora no sé qué hacer, no tengo adónde llevar a mis cuatro hijos, mi casa es lo único que he logrado después de 30 años de trabajo y no podría pagar un arriendo”, expresó  Ávila entre sollozos.

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En la ciudadela Los Trigales 103 familias atraviesan una situación similar:  70 casas están cuarteadas; 20 ya son inhabitables, pero las familias que no tienen adónde ir siguen allí y 13  optaron por salir para vender o arrendar.  El presidente del barrio, Humberto Cárdenas, señaló que el conjunto habitacional de 103 viviendas lo construyó hace catorce años  la empresa Construarias con permisos municipales y un crédito del Banco Ecuatoriano de la Vivienda (BEV).

La morada de Cárdenas es una de las afectadas, la pared posterior del inmueble está cuarteada, desde los cimientos hasta la parte más alta, por eso trasladó los dormitorios traseros de sus tres hijos a la sala, la cocina y el comedor los reubicó en el jardín.

Los daños en todas las casas aparecieron paulatinamente luego de unos tres años que las recibieron, pero nadie notó que era un problema general sino hasta que nos reunimos, indicó Mayra Ariopiajas, otra de las perjudicadas.

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CIUDADELA

ESTUDIO
Un estudio realizado por la Dirección Nacional de Geología, solicitado por los moradores, reveló que se desconocían las condiciones geológicas del terreno y hubo falta de planificación para ubicar el uso adecuado del suelo, además se alertó que las construcciones son antitécnicas.

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INSPECCIÓN
El lunes pasado Carlos Castro, alcalde encargado de Cuenca, recorrió el sector con otros concejales y varios técnicos de la Municipalidad y se conformaron tres comisiones que desde el miércoles iniciaron las acciones de prevención, mitigación y evacuación, según Antonio Castillo, director de la Unidad de Desastres de la Municipalidad.

AYUDA A GOBIERNO
Castro solicitó al Gobierno una ayuda no menor a 2’000.000 de dólares, para realizar las obras de emergencia y la reposición de viviendas de los afectados y así resolver la grave situación que viven decenas de familias.