Los ex mandatarios León Febres-Cordero (PSC) y Abdalá Bucaram (PRE) controlaron desde Guayaquil y Panamá, respectivamente, las decisiones de sus bloques legislativos.

El líder socialcristiano estuvo pendiente de la sesión extraordinaria por radio, televisión. Desde su casa, ubicada en Urdesa Central, se contactaba por teléfono con los diputados de su partido en compañía de su yerno Miguel Orellana. 

Una situación similar sucedió en la casa de Bucaram, en Panamá, quien se comunicó también por  vía telefónica con los legisladores roldosistas, y con su hijo Jacobo Bucaram Pulley, quien estuvo en la Presidencia de la República en la mañana, y en la tarde en el Parlamento.