Los científicos han detectado una serie de temblores en las profundidades de la falla de San Andrés, en el centro de California, que podrían ser una avanzadilla de un gran terremoto en el futuro, según un estudio difundido este jueves.
 
El estudio de investigadores de la Universidad de Berkeley y publicado en la revista "Science" identificó 110 temblores de cuatro minutos o más de duración a lo largo de un periodo de tres años.
 
Estos pequeños terremotos precedieron a dos seísmos intensos, uno de magnitud 6,5 en la escala de Richter, en Paso Robles, que costó la vida a dos personas en diciembre del 2003 y otro de magnitud 6 en la misma, cerca de Parkfield, a principios de este año, en el que no hubo víctimas.
 
Los temblores emanan a una profundidad de entre 20 a 40 kilómetros bajo la superficie, dijo Robert Nadeau, investigador del Laboratorio Sísmico de Berkeley y co-autor del estudio.
 
Se trata de temblores que, en su mayor parte, son cinco veces mayores que la media en este segmento de la falla.
 
Este es el primer informe de temblores no volcánicos en la zona, y da nuevas pistas sobre la influencia de los materiales líquidos en la generación de los movimientos sísmicos, así como sobre el comportamiento de la falla de San Andrés en el futuro.
 
Los científicos ignoran si hay una relación entre estos seísmos en las profundidades y los de la superficie, aunque creen que lo que ocurra debajo podría servir para anticipar el comportamiento de la temida falla.
 
Nadeau señaló que se trata de un avance importante en el entendimiento de los procesos en el interior de la tierra que generan terremotos.
 
David Schwartz, jefe de la unidad de terremotos de San Francisco, dependiente del Observatorio Geológico de Estados Unidos, señaló que nunca antes se habían detectado en la falla de San Andrés temblores como estos, a gran distancia de la superficie de la tierra.
 
Las investigaciones en torno a esta falla se siguen con preocupación porque hace unos años un grupo de expertos estimó que ocurriría un gran terremoto en la zona de Cholame, cerca de Paso Robles, cada 140 años, aproximadamente, y el último terremoto en esta zona se produjo hace 147 años.