Dos de los observatorios espaciales de la NASA captaron un sistema planetario en plena evolución, que incluye escombros y polvo cósmico en torno a estrellas del tamaño del Sol, informó este jueves el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL).
 
El JPL señaló en un comunicado que el descubrimiento fue hecho de manera conjunta por los telescopio Spitzer y Hubble, que operan desde una órbita en torno a la Tierra.
 
Se trata de la imagen más clara que se haya logrado captar de las fases iniciales de la evolución de planetas, indicó el laboratorio de la Agencia de Aeronáutica y el Espacio de EEUU (NASA) en Pasadena (California).
 
Los planetas nacen de la conjunción de discos de polvo y gas concentrados en torno a una estrella, y estas "instantáneas" son una especie de recreación de la forma en que evolucionó nuestro propio Sistema Solar a partir de un nacimiento caótico para terminar en esta actualidad apacible, precisó.
 
Según Charles Beichman, un astrónomo del JPL, el Hubble descubrió la estrella central, de unos 50 a 25 millones de antigüedad, y el Spitzer, un gran sector de los escombros, "con lo que se demuestra que ambos telescopios pueden complementarse".
 
"Spitzer ha establecido por primera vez una vinculación directa entre los planetas y los discos, y ahora podemos estudiar esa relación", dijo.
 
"La nueva imagen del Hubble nos permite echar la mejor mirada posible a la luz reflejada desde un disco que gira en torno a la masa de un sol", señaló David Ardila, director del estudio y astrónomo de la Universidad Johns Hopkins.
 
El disco de escombros captado por el Hubble ha sido identificado como HG 107146 y se encuentra a una distancia de 88 años luz de la Tierra.