La Cámara baja aprobó ayer la legislación para reformar la red de inteligencia estadounidense, una ley que estuvo a punto de naufragar por disputas referidas al control del Pentágono sobre algunos recursos clave de espionaje.

El histórico proyecto de ley, aprobado por 336 votos contra 75, adopta las recomendaciones de la Comisión del 11 de septiembre (por los atentados del 2001) sobre los modos para desalentar futuros ataques terroristas en EE.UU.

La senadora republicana Susan Collins dijo que esta legislación histórica otorga una renovación muy necesaria al viejo aparato de seguridad norteamericano, que data de hace medio siglo.