El cadáver de un hombre fue encontrado envuelto en sábanas y cobijas en la cooperativa Carlo Magno Andrade, al norte de Guayaquil, mientras que  un joven fue asesinado a tiros en el Guasmo Central (sector sur). Ambos crímenes ocurrieron entre las 05h00 y 06h00 de ayer.

Moradores de la cooperativa de vivienda Carlo Magno Andrade, ubicada detrás de la ciudadela Samanes 7, avisaron a la Policía el hallazgo del cuerpo. “Nosotros vimos que a las 06h00 un carro blanco se estacionó largo rato y dejaron algo. Luego la gente notó que había un bulto cubierto con un plástico negro, lo destaparon y vieron que era un muerto”, expresó Juan Martínez, habitante de la cooperativa.

El cuerpo, que fue desenvuelto por los curiosos, tenía varios impactos de bala en el pecho, cortaduras y golpes en la cara. Además tenía atadas las manos con un cable de una plancha doméstica y los pies con una soga. Por su estado se presume que el individuo había sido asesinado hacía pocos minutos.

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Agentes de la brigada de Homicidios de la Policía identificaron a la víctima como Gregori Ricardo Triana Cabrera. Tenía aproximadamente  30 años y era oriundo de Vinces (provincia de Los Ríos).

Abaleado
Javier Agustín Peña Gilces, de 23 años, recibió ocho disparos mientras esperaba el bus que lo llevaría a su trabajo en una fábrica de aluminio.

Según Rosa Gilces Zambrano, madre del fallecido, este salió de su domicilio ubicado en la cooperativa Nueva Granada del Guasmo Central, a las 06h00, y esperaba el expreso cuando un auto Skoda color gris y con vidrios polarizados se detuvo y un sujeto que venía en el vehículo le disparó.

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“Primero le dieron un tiro en la pierna derecha, al ver que mi hijo no podía correr, lo remataron con siete tiros más”, relató la mujer mientras esperaba el cadáver de su hijo en la morgue policial.

Walter Peña, hermano del occiso, manifestó que esta no es la primera ocasión en la que suceden este tipo de hechos, pues en el sector ya han ocurrido asesinatos y vehículos sospechosos recorren las calles a toda hora.

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“Está bien que el Alcalde se preocupe de la seguridad de la ciudad, pero también debe acordarse de los sectores suburbanos, donde la delincuencia está terrible, acá ya no es posible vivir”, dijo.