Leo Papilión, de Henry Cherrière, novela autobiográfica que cuenta la historia de su condena en la cárcel de la Guayana Francesa por un crimen que nunca cometió, había sido sí un niño bien, ladrón de cajas fuertes en el París de la bohemia y la vida mundana de las primeras décadas del siglo XX.

Se trata de una cárcel de la que pocos salen vivos. Las historias que se cruzan son horrorosas pero el autor les da un tinte de cuento de hadas.

Me ayuda a sobrevivir en Manabí, aquí respiro un ambiente agobiante en lo social y espiritual, pero me identifico con este personaje. A veces creo que soy él. Releo la obra y como ejercicio de memoria me la cuento para poder respirar.

Publicidad

La isla donde está preso es un infierno truculento, obsceno y bestial, Papilión finalmente logra escaparse y le aflora  una vaga idea de Dios.

* Escritor y periodista manabita.