Las novelas negras y policiacas han dejado de estar escritas exclusivamente por hombres y cada vez son más las autoras que reivindican un hueco en un género que ocupa el espacio que dejó la novela social a fines del siglo XX.

Casi una decena de expertos en el género negro concluyeron la noche del viernes  un foro en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) dedicado a la novela negra en el que participaron dos autoras, la argentino-mexicana Myriam Laurini y la mexicana Julia Rodríguez.

Según Laurini, el género negro está marcado tradicionalmente por una omnipresencia de los protagonistas varones, con lo cual parece que solo son ellos los malos, los perversos, los torturadores.

Publicidad

Pese a esa circunstancia Laurini señaló que también hay mujeres horribles que poco a poco van ganando espacio y protagonismo en estas novelas. La escritora señaló que la historia no estaba exenta de mujeres perversas entre quienes mencionó a las que, en su Argentina natal, traicionaron a los colectivos sociales en los que militaban y se convirtieron en “torturadoras durante la época de la última dictadura militar”.

Julia Rodríguez, autora de ¿Quién desapareció al comandante Hall? , dijo que nunca se planteó cultivar el género negro, pero fue la indignación lo que la llevó a ello.