Los guardias privados que desde el pasado viernes custodian 40 puntos, considerados críticos en la ciudad, continuaron ayer normalmente las labores en sus lugares asignados.

En un recorrido que realizó un equipo de este Diario se verificó si los celadores se encontraron con algún inconveniente durante su turno de guardia.

Pedro Proaño, de la compañía Mac Security, quien junto a Emiliano Medina vigilan la esquina de Rocafuerte y Vernaza, dijo que lo más relevante de su jornada son los reportes de carros robados que recibió desde la central de radio.

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“Nos comunicaron desde la central que en el centro hubo un robo de un carro y se nos dispuso que si veíamos el vehículo avisemos para que ellos a su vez alerten a la Policía”, indicó.

Proaño agregó que sus compañeros reportaron que tuvieron que intervenir en riñas familiares en diferentes sectores de la ciudad,  asimismo los custodios llamaron a los gendarmes.

En otros lugares como El Oro y Rosa Borja de Icaza (ingreso al Barrio del  Centenario, Carlos Salazar y Álex Alvarado, de la empresa Seguire, manifestaron que no tuvieron novedades durante su turno.

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En el norte de la ciudad, los celadores Eduardo Carrillo y Carlos Espinoza, de la empresa Sesei, quienes resguardan los bajos del paso a desnivel de la avenida Juan Tanca Marengo (diagonal al colegio Espíritu Santo), dijeron que varios ciudadanos que esperan bus en ese lugar les  manifestaron que se sienten seguros con su presencia.

Álex Figueroa y Édisson Marcillo, de Laar Cía. Ltda., ubicados en la curva del distribuidor de tráfico que conduce a la Av. Francisco de Orellana, señalaron que en su jornada no se presentaron  percances.