La animadora peruana de la cadena estadounidense  Telemundo, Laura Bozzo, calificó de circo el proceso donde se le juzga por  asociación ilícita para delinquir, porque la sala penal le rechazó el pedido de  citar al presidente Alejandro Toledo como testigo en su caso.
 
"Hoy se me terminó de caer la semi venda que tenía sobre la justicia  peruana. Hoy estoy convencida que esto es un circo vergonzoso", dijo Bozzo en  rueda de prensa desde el estudio de televisión, donde cumple arresto  domiciliario desde hace 27 meses y de donde transmite su popular talk-show.
 
La indignación de la animadora es porque este viernes durante la audiencia  en la Base Naval del Callao (oeste de Lima) la sala anticorrupción "C" le  rechazó el pedido de incluir al Jefe del Estado en la lista de testigo de  Bozzo.
 
La solicitud fue fundamentada por la propia animadora, quien ejerce su  autodefensa apoyada por varios abogados, a fin que Toledo explique si en su  desaparecido programa "Laura en América" lo perjudicó cuando era candidato  presidencial en las elecciones del 2000.
 
"Hoy he comprobado que no va a ver justicia para Laura Bozzo. A Laura Bozzo  tienen que condenarla como sea, con pruebas falsas, con testimonio, con lo que  sea pero Laura Bozzo no tiene derecho a defenderse", enfatizó.
 
La Sala Anticorrupción "C" rechazó citar como testigo al presidente  Alejandro Toledo argumentando que fue presentado fuera de tiempo.
 
Fernando Ugaz, abogado de la conductora de Telemundo presentó un escrito  para citar a 18 testigos y el Tribunal Anticorrupción "C" aceptó que concurran  cinco personas de esa lista.
 
Bozzo, de 53 años, es acusada por bajo cargos de peculado y asociación  ilícita para delinquir, por los que el fiscal ha pedido una pena de siete años  de cárcel.
 
La procuraduría anticorrupción asegura que existen pruebas para señalar que  integraba "la organización criminal" que lideró el ex asesor presidencial,  Vladimiro Montesinos.
 
En el proceso también está incluido Montesinos, el ex brazo derecho del  presidente Alberto Fujimori (1990-2000), por quien el fiscal pide ocho años de  cárcel. Los experimentados cómicos de la televisión Tulio Loza y Carlos  Alvarez, acusados de haber recibido dinero proveniente de los servicios de  inteligencia parar apoyar la campaña reeleccionistas del ex mandatario.