Familiares de las víctimas de la dictadura del  general Augusto Pinochet en Chile, calificaron este miércoles de "cárcel VIP"  la nueva prisión destinada a militares acusados de violaciones de los derechos  humanos.
 
"Más que una cárcel VIP (Very Important Person) es un resort de  descanso", dijo a la AFP la presidenta de la Agrupación de Familiares de  Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro.
 
"Es un recinto con comodidades impresionantes para quienes cometieron toda  clase de atrocidades", agregó la dirigente, después de que el presidente  Ricardo Lagos dispusiera la creación de una nueva cárcel especial para los  militares, que el Ejército entregará este viernes a los servicios de  Gendarmería.

Lagos ordenó habilitar el presidio seis días después de que la Corte  Suprema, a través de un veredicto que marcará jurisprudencia para otros  procesos, determinara que una amnistía dictada por Pinochet no es aplicable a  los militares acusados de desapariciones forzadas.
 
El ministro de Justicia Luis Bates, quien firmó el decreto del presidente  Lagos, negó sin embargo que ésta sea una "cárcel VIP" y sostuvo que lo que  importa es la vigencia del Estado de derecho para que se cumplan las sentencias  del Poder Judicial cuando concluyan los procesos que enfrentan más de 160  militares en retiro.
 
Bautizada como Penal Cordillera, la cárcel funcionará en el recinto militar  de Peñalolén, al sureste de Santiago. Dotada de céspedes, una cancha de tenis y  una piscina en desuso, posee cinco cabañas pintadas de blanco con capacidad  para recibir a cuatro reclusos cada una, según imágenes que mostró la  televisión.
 
El nuevo presidio se suma al penal de Punta Peuco, construido hace nueve  años cuando los tribunales dictaron sus primeras sentencias contra militares  por algunos de los más de 3.000 muertos y desaparecidos que dejó la dictadura  de Pinochet (1973-1990). "Punta Peuco está lleno y, por lo tanto, hay que  expandir Punta Peuco. Y tan pronto esté expandido Punta Peuco, se volverán  todos a Punta Peuco", aseveró el gobernante.
 
Agregó que "no hay ningún privilegio (para los militares) y Gendarmería va  a dar a conocer cuales son las disposiciones de esa cárcel (...) será un  régimen carcelario normal".
 
El anuncio de la construcción de Punta Peuco provocó tensiones en el  gobierno del ex presidente Eduardo Frei (1994-2000), cuando su ministro de  Obras Públicas, el actual presidente Lagos, se opuso a firmar el decreto, que  finalmente fue suscrito por el titular de la cartera de Justicia.
 
El abogado Nelson Caucoto, representante de organizaciones humanitarias,  también se opuso a que los militares tengan privilegios que no se extienden al  resto de la población penal de más de 35.000 reclusos, que cumplen prisión en  condiciones de hacinamiento.
 
"Aspiramos, como una utopía, a que todos los presos en este país puedan  tener las mismas condiciones que van a tener los militares en estas nuevas  cárceles", dijo Caucoto.
 
"Porque entre unos y otros no hay ninguna diferencia: son todos  delincuentes", agregó.