Vietnam rechazó ayer las críticas del papa Juan Pablo II sobre la falta de libertad religiosa en Asia y aseguró que sus leyes garantizan la libertad de todos los creyentes.

“Quiero confirmar que en Vietnam los derechos de la libertad de religión y no religión están garantizados por ley y en la práctica se respetan”, dijo Le Dung, portavoz de la cancillería vietnamita.

“Los creyentes, en particular los cristianos, son libres de practicar su fe”, añadió.

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El viernes pasado, el Papa instó a los católicos de Asia a “esperar con paciencia la libertad religiosa”, especialmente en aquellos países que les prohíben “profesar su fe”.

El sumo pontífice, que no especificó los países afectados, hizo el pedido ante los miembros de la secretaría general del sínodo de Obispos de Asia reunidos en el Vaticano.

Aunque no los nombró, el Papa se refería probablemente a China, donde existe una iglesia católica clandestina.