Con una huelga de hambre y sangrado de brazos, los miembros de la Asociación de Empleados de la Gobernación del Guayas iniciaron ayer su quinta semana de paralización.

Ellos se unieron al resto de servidores públicos del país que están en paro y que hoy inician la huelga de hambre para exigir del Gobierno que asigne recursos económicos para la homologación salarial de ese sector.

Acostados en cuatro colchones de espuma ubicados en los bajos del edificio de la Gobernación de Guayas, seis empleados, entre ellos dos mujeres, indicaron que no comerán hasta que se acepte su demanda.

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Con la ayuda de una compañera, varios de los huelguistas se sacaron sangre y con ella trataron de escribir la palabra homologación, mientras que afuera del edificio otras personas intentaban ingresar para realizar algún trámite en una de las siete comisarías que ahí funcionan.

El empleado encargado de custodiar la entrada dijo que solo se estaba atendiendo en una oficina adjunta de la Comisaría de la Mujer, pero que solo si eran casos graves.

En Quito, los trabajadores de cinco ministerios anunciaron que hoy a las 10h00 inician la huelga de hambre en las inmediaciones del Congreso Nacional. Además marchan desde la Confederación Nacional de Servidores Públicos del Ecuador (Conasep) hasta el Congreso.

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En Cuenca, cinco afiliados de la Federación de Servidores Públicos del Azuay se sumaron a la huelga de hambre mientras que en Machala, provincia de El Oro, catorce servidores públicos iniciaron ayer en la mañana esa medida de protesta. También paralizaron el centro de la ciudad con una marcha.

Por su parte, los trabajadores del Ministerio de Salud dieron ayer al Gobierno 72 horas de plazo para definir la firma del noveno contrato colectivo y decidir un incremento del presupuesto para la salud en el 2005.