La renuncia de Donald Castillo a la administración de la Corporación para la Administración Eléctrica de Guayaquil (Categ), provocó este jueves  reacciones de representantes locales que exigen despolitizar el cargo.

El presidente del Comité de Clientes del Banco del Progreso, Nicolás Brito, dijo que cuando se había logrado poner al frente de la Categ a un entendido en la materia energética como Castillo, es cesado en sus funciones, porque “se están negociando los contratos de la empresa”, anunció en radio CRE.

Para el representante de los acreedores del Banco del Progreso, la remoción de Castillo se debió a una acción político “orquestada por el Gobierno Nacional en contra de las empresas más importantes de Guayaquil como son la ex Emelec y la ex Electroecuador”. 

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“No importa quien sea, sino que apelamos al ofrecimiento del Presidente”, expresó el titular del Comité Fiduciario, Francisco Alarcón, quien demandó una administración privada para la Categ.

Por su parte, Bernardo Henríquez, quien fue nombrado sucesor de Castillo, pero que aún no ha sido posesionado, señaló que tendrá mano dura para combatir el robo de energía en la ciudad.

De su lado, Dimitri Durán, procurador judicial de los sectores representativos de Guayaquil, exhortó a que se dé paso a la concesión de la Categ a las empresas guayaquileñas.

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