Médicos franceses informaron que el presidente palestino está en coma tras un derrame cerebral.

Yasser Arafat sufrió una apoplejía o derrame cerebral y está en estado de coma profundo, afirmó ayer Tayeb Abdel Rahim, secretario de la presidencia palestina, desmintiendo rumores vertidos por medios de comunicación sobre la muerte del líder palestino.

Tras una jornada marcada por la incertidumbre sobre el estado del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), el encargado de Relaciones Exteriores de los palestinos, Nabil Shaath, afirmó que “Arafat recibe respiración artificial y los auxilios dados a una persona en coma”.

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El general Christian Estripeau, vocero del Hospital Militar Percy, declaró que el líder palestino vive, aunque su estado empeoró durante la noche y “cayó en un coma profundo”.

Leila Chahid, delegada de Palestina en Francia, también afirmó que el presidente palestino seguía “en vida”.

Todos reaccionaron de esa forma a la declaración de un ministro palestino que había afirmado en Ramala a la AFP, pidiendo no ser identificado, que Arafat había muerto.

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También la cadena de televisión Al Arabiya y la agencia Reuters anunciaron la muerte de Arafat citando fuentes cercanas al dirigente palestino, que pidieron el anonimato.

Otros funcionarios de la ANP dijeron a Reuters que se esperaba a que el clérigo musulmán, Taysser Al Tamimi, presidente del Consejo Superior del Tribunal Islámico de Cisjordania y la Franja de Gaza, llegase a Francia para desconectar los equipos que lo mantienen con vida al presidente de la ANP.

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Sin embargo, Nabil Shaath descartó la eutanasia advirtiendo que esta práctica no es aceptada por los musulmanes ni ha sido planteada por los médicos ni la familia”, menos aún dado que Arafat no sufre.

Una delegación de autoridades palestinas integrada por Shaath; el primer ministro palestino, Ahmed Quorei; y el lugarteniente de Arafat, Mah- moud Abbas, retornó anoche a Ramala, tras entrevistarse en París con el personal médico del hospital Percy.

Ayer, el presidente de EE.UU., George W. Bush, ratificó a su homólogo de Egipto, Hosni Mubarak, su compromiso “para trabajar en la creación de un estado palestino” tras la desaparición de Arafat, según diarios egipcios.