Juan Villoro se adjudicó el primer lugar con su obra literaria ‘El Testigo’ y el argentino Eduardo Berti quedó finalista, su libro se titula ‘Todos los funes’.

El escritor mexicano Juan Villoro se adjudicó ayer el XXII Premio Herralde de Novela con su obra El Testigo y el argentino Eduardo Berti fue finalista con Todos los Funes.

El mexicano –que se adjudicó el premio con la unanimidad del jurado– se presentó al premio con su novela bajo el falso título de El regreso y firmado con el pseudónimo Kostia. Se trata de la historia de un mexicano exiliado en Francia que vuelve a su país.

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El jurado destacó en su fallo “la calidad de todas las obras finalistas y la amplia presencia de escritores latinoamericanos”.

A esta edición se presentaron 264 novelas, con amplia representación de aspirantes latinoamericanos.

Entre los autores que llegaron a las últimas votaciones figuraban uno de Argentina, uno de Colombia, dos de México y uno de Perú. 

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Un hecho que, para el editor Jorge Herralde, responde “a la vitalidad actual de los creadores hispanoamericanos”.

El Premio de novela Herralde –que anualmente convoca la editorial Anagrama– está dotado con 18.000 euros para el ganador y fue fallado ayer al mediodía en un hotel céntrico de Barcelona.

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El finalista Berti se presentó bajo el pseudónimo de Roberto Funes y el título de El último pasajero, mereciendo el segundo premio con su obra finalmente titulada Todos los Funes.

La obra ganadora tiene como protagonista principal a Julio Valdivieso, un intelectual mexicano emigrado a Europa, profesor en la Universidad de Nanterre que vuelve a su país después de una larga ausencia. El PRI ha perdido al fin las elecciones y se inicia un peculiar periodo de transición.

Pero esta vuelta a un presente muy distinto del que dejara cuando se fue, se convertirá en una oportunidad de descifrar su pasado, el de su familia, el de su país, en una novela que despliega su trama como un inquietante mecanismo de precisión.

Biografías
Juan Villoro nació en el Distrito Federal el 24 de septiembre de 1956.

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Agregado cultural en la Embajada de México en Berlín, dentro de la entonces República Democrática Alemana, de 1981 a 1984, Villoro colaboró en las revistas Cambio, Gaceta del Fondo de Cultura Económica, Universidad de México, Crisis, La Orquesta, La Palabra y el Hombre, Nexos, Vuelta, Siempre, Proceso y Pauta, entre otras.

Además, el escritor mexicano obtuvo antes el Premio Cuauhtémoc de traducción en 1988 y el Premio Xavier Villaurrutia en 1999.

Cuenta entre sus obras más representativas la novela El disparo de Argó (Alfaguara, 1992), Tiempo transcurrido (1986), La noche navegable (1980), Palmeras de la brisa rápida, un viaje a Yucatán (1989) y La casa pierde (1999), entre otros.

El finalista Eduardo Berti nació en Buenos Aires en 1964, pero su actual residencia es París, Francia.

Es autor también de libros periodísticos y de documentales televisivos (La  cueva, Rocanrol), su obra literaria fue elogiada, desde su libro de relatos Los pájaros, hasta las actuales novelas Agua, recientemente publicada en Francia, y La mujer de Wakefield.

 Berti es colaborador de diversos medios escritos, como El Porteño, Página/12 y Clarín.

La mujer de Wakefield fue nominada en Francia para el Premio Femina a la mejor novela extranjera del 2001. 

El jurado del premio, fallado este mediodía en un hotel céntrico de Barcelona, estuvo compuesto por Salvador Clotas, Juan Cueto, Esther Tusquets, Enrique Vila-Matas y Jorge Herralde.