Seis casas balsas que están asentadas en el río Babahoyo y fueron clausuradas hace cuatro meses porque funcionaban como prostíbulos, volvieron a atender ayer, según se quejaron varios moradores del lugar.

Joffre Guamán, quien habita cerca del sitio, dijo que nuevamente se ven personas apostadas en las orillas del malecón observando a las mujeres que laboran en los prostíbulos asomadas con poca ropa.

Las familias recuerdan que las casas de cita sobre el agua fueron clausuradas por el intendente de Policía de ese entonces, Lenín Pérez, quien incluso dispuso que en el exterior de esas viviendas  se quedaran varios policías custodiando para que no las volvieran  a abrir, pero hace poco se los retiró del sitio.

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Sería bueno que las autoridades se porten serias y no permitan que esto comience a funcionar nuevamente. Su presencia da mala imagen a las famosas casas balsas que son parte de nuestra historia, indicó con pesar Joffre Guamán.

El intendente de Policía, Néstor Basantes, señaló que no ha dado permiso para que se reabran las casas balsas ya que estas están clausuradas. Dijo que  espera dialogar con las demás autoridades seccionales  y de Gobierno, y con las de Policía para juntos buscar la forma de que estos prostíbulos no vuelvan a funcionar.

Las familias señalaron que esperan que se cumpla la promesa del Intendente.