La tercera aerolínea de Estados Unidos, Delta, anunció ayer que despedirá a unos 6.900 de sus más de 60.000 trabajadores como parte de su plan para reorganizar el negocio y evitar la bancarrota.

Delta despedirá unos 2.000 trabajadores de mantenimiento de aviones, unos 3.100 dedicados a los servicios al cliente, así como de 1.600 a 1.800 supervisores y empleados administrativos, dijo una portavoz.