Los diputados de la Izquierda Democrática (ID) niegan que el Partido Social Cristiano (PSC) les esté ganando protagonismo en el juicio político planteado contra del presidente de la República, coronel Lucio Gutiérrez, tal como lo han señalado parlamentarios de otras tendencias políticas.

“En la ID no hay preocupación sobre el protagonismo del juicio político. Esas son cosas que no caben en un bloque serio como la ID. Es una operación conjunta.
Lo que hemos dicho es que nadie pretenda buscar protagonismo de ninguna clase”, especificó el legislador socialdemócrata, Wilfrido Lucero.

Pero para el vicepresidente del Parlamento, Ramiro Rivera, de la Democracia Popular, es el PSC quien lleva las riendas de las acusaciones.  “No cabe duda: el motor del juicio político lo constituye el ex presidente de la República, León Febres-Cordero”, dijo.

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El legislador socialista, Segundo Serrano, es más rotundo al señalar la influencia del partido de derecha: “El que está ganando protagonismo es el Social Cristiano, los demás están de arrimados. El cerebro gris de este juicio político es  León Febres-Cordero: él va a ser el interpelante. Febres-Cordero se está sacando el clavo con Gutiérrez, su antiguo aliado, con quien compartían el poder hasta hace pocos días”, manifestó.

Según el diputado Carlos González (ID), el protagonismo carece de importancia, puesto que “el juicio fue propuesto por la Izquierda Democrática hace dos años, no ahora. Hace dos años pedimos la salida de Gutiérrez cuando nos enteramos que recibió dinero desde México para la campaña electoral”.

Andrés Páez, de la misma tienda política, consideró que “no hay protagonismos exclusivos, tampoco es ese el propósito. Es un acto de fiscalización que conlleva ciertos protagonismos colectivos y no individuales. Lo medular no son las personas sino el acto de enjuiciar al Presidente de la República”.

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Para la legisladora del partido socialista, Guadalupe Larriva,  “Febres-Cordero está tomando la batuta en el juicio, cuando este proceso debía enlazar a todos los bloques del Congreso Nacional por igual y no hacer que unos tengan mayor prominencia que otros”.

Ante ello, la diputada Miriam Garcés (ID), aclaró que “no han dejado a un lado a ningún sector legislativo, porque el juicio no es de ahora; está planteado desde hace un año, cuando bien pudieron adherirse al proceso, pero tuvieron que agudizarse las contradicciones para que el juicio se realizara”, afirmó.