El primer ministro interino iraquí, Iyad Alaui, reiteró hoy que no negociará "con los asesinos" que pueblan las ciudades rebeldes de Faluya y Ramadi, que se encuentran bajo asedio de las tropas estadounidenses.
 
En una rueda de prensa ofrecida en Bagdad, el jefe del Gobierno transitorio también reveló que en los últimos días han sido arrestados en todo Iraq "167 combatientes extranjeros", entre ellos varios sudaneses, sirios y saudíes y un cercano asistente de Ezzat Ibrahim, antiguo "número dos" de Sadam Husein.
 
"No vamos a buscar ninguna salida negociada con los seguidores del (extremista jordano, Abu Musab) al-Zarqaui, ni con los miembros de la (red terrorista internacional) Al-Qaeda ni con los partidarios del (derrocado presidente iraquí) Sadam Husein", afirmó Alaui ante los periodistas.
 
"Si no nos escuchan e insisten en atacar a los iraquíes, haremos uso de todo nuestro poder militar", advirtió el político chií, quien recuperó su discurso más duro y volvió a exigir la entrega de Al-Zarqaui.
 
Estados Unidos y el Gobierno interino iraquí creen que el supuesto socio de Osama Ben Laden, al que consideran la principal amenaza terroristas en Iraq, se esconde en algún lugar de Faluya, localidad ubicada a unos cincuenta kilómetros al oeste de Bagdad. Por ello, exigen a los notables que controlan la ciudad desde la fracasada ofensiva lanzada por las tropas estadounidenses el pasado abril, que entreguen al presunto terrorista y a sus secuaces.
 
"La única solución pacífica que contemplamos está vinculada al respeto a la ley, a la dignidad y al futuro del pueblo iraquí. El Gobierno solo se pone al lado de todo aquel que desea que reine la paz en Iraq", agregó. La advertencia de Alaui coincide con una jornada en la que las tropas de Estados Unidos han intensificado su asedio a la ciudades de Ramadi y Faluya, y bombardeado con insistencia los barrios norte y oeste de esta última ciudad.
 
Durante su alocución, en la que estuvo acompañado por el asesor nacional de Seguridad, Kazem Daud, Alaui también se refirió al robo de unas 400 toneladas de armamento que estaban almacenadas en la santabárbara de Al Qaeda. "Hemos ordenado que se abra una investigación, que ya está en marcha y revelaremos los resultados en cuanto los tengamos", prometió.