La Plaza Rodolfo Baquerizo Moreno se convirtió la mañana de ayer en un museo donde se exhibieron 14 representaciones en miniatura de los sitios turísticos de la ciudad.

Todos los modelos fueron elaborados con materiales reciclables como parte del taller de manualidades ‘Juguemos a Reciclar’, organizado por la Fundación Malecón, que ayer premió a sus ganadores.

El primer lugar lo obtuvieron cinco estudiantes de la escuela San Gabriel, quienes construyeron el puente peatonal que une las dos partes del Malecón del Salado con cartón, sorbetes y papel.

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Las hojas de los árboles y plantas fueron confeccionadas con platos de espumafón. Y para los postes de luz se utilizaron tapas de botellas y más cartón.

Cinthya Hidalgo, una de las creadoras de esta obra, enfatizó que “el proceso de construcción parecía difícil al principio, pero después con el trabajo en equipo no se sintió la complejidad”.

Mientras relataba, sus compañeros admiraban su trofeo ‘Latoso’, que tenía forma de un tacho de basura animado. También revisaron los libros que formaron parte del premio y guardaron las entradas al cine Imax para repartirlas a sus compañeros en clase.

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La delegación de la escuela Francisco de Orellana confeccionó una réplica de la Torre del Reloj, ubicada en el Malecón 2000.

La estructura era de cartón, las ventanillas de papel brillante negro y verde, el reloj era un pedazo de plato de cartón con forma circular y los números fueron delineados con marcador y pluma.

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El colegio fiscal Clemente Huerta ganó el tercer puesto por su obra ‘El hemiciclo de la Rotonda’.

Otros planteles se inclinaron por el uso de botellas plásticas para montar la Sala de Convenciones de la Plaza Baquerizo Moreno y la fuente del Malecón 2000.

La muestra se exhibirá este fin de semana.