Según un estudio de Médicos Sin Fronteras, el 95% de la población carece de servicios básicos y de salud.

Los finos cables de electricidad que cuelgan de los postes y el ir y venir de los tanqueros por las polvorientas vías de Flor de Bastión dan cuenta de una realidad innegable: el 95% de la población no puede acceder a los servicios básicos indispensables para su subsistencia.

El problema está a la vista: solo un 5% de la cooperativa, dividida en 21 bloques, tiene agua en la red pública. No hay alcantarillado ni servicio de recolección más allá de las calles principales, y únicamente 15.000 de sus 55.000 habitantes se benefician de la red de alumbrado público.

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Las cifras son parte de un estudio de la organización española Médicos Sin Fronteras, que, basado en esta problemática, decidió llevar su labor comunitaria a este sector. Lo hace desde el 2002 con un programa de salud sexual y reproductiva, planificación familiar y control de la violencia doméstica en once colegios y tres subcentros de la zona.

Su misión es ampliar la cobertura de asistencia médica y educar a la población sobre sus derechos en estas áreas.
Como parte de esa gestión los próximos 6 y 7 de noviembre, de 10h00 a 22h00, la organización abrirá la exposición ‘Flor de Bastión: Imágenes y Testimonios’ en la plataforma del Museo Antropológico de Arte Contemporáneo.

La idea, según Patricia Parra, coordinadora de Médicos Sin Frontera en el lugar, es acercar al resto de la población a las dificultades que tiene la gente de este sector para cubrir sus necesidades básicas. “Queremos sensibilizar a la opinión pública, sobre todo a las autoridades de la exclusión que sufren los habitantes de las zonas urbano marginales”, dice.

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Para el efecto, instalarán en el Malecón una casa de caña prefabricada de la corporación Hogar de Cristo, similar a la que el 41% de los moradores posee. Y es que, de acuerdo con el informe de esta ONG, solo el 27,7% de los habitantes tiene vivienda de cemento y un 26,9% de tipo mixta.

Y no es lo único. La problemática también se extiende a la vida sexual de los adolescentes. En una encuesta realizada en enero de  este año a 820 personas (473 mujeres y 374 hombres), de entre 10 y 49 años, se determinó que el 69,8% ya ha tenido relaciones sexuales y que las iniciaron entre los 14 y 17 años. A esto se suma que un 17,8% las empezó antes de los 14 y que en las mujeres la media de embarazos es de 19 años.

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Médicos Sin Fronteras ha plasmado la situación de esta zona en un libro titulado Vivir en Flor de Bastión, que será entregado en una exposición inicial a autoridades y ONG el 5 de noviembre, a las 18h00, en la Alianza Francesa.