Plan Oro Negro es como se llama la operación que desde este 1 de noviembre emprenderá el Servicio de Rentas Internas (SRI) y la Dirección Nacional de Hidrocarburos (DNH) con el fin de facturar la venta de combustible en el país.

Con este sistema, las instituciones estatales esperan tener un registro y una estadística de cuánto combustible se vende en el país. Por tanto, en primera instancia se facturará la venta de gasolina y de gas licuado de uso doméstico.

El anuncio lo hizo el director del SRI, Vicente Saavedra, quien señaló que con esta medida no se pretende elevar el costo del cilindro de 15 kilos de gas de uso doméstico ($1,60), sino que se espera tener un mayor control de su venta.

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Asimismo, el funcionario advirtió que no permitirá que personas que incumplan con la normativa sigan operando en el país.

Además, con esta medida se espera frenar el tráfico de gas de uso doméstico que se realiza en las fronteras sur y norte del Ecuador.