Es de mucho mérito y digno felicitar las actividades desarrolladas para Guayaquil. Asimismo es importante que la ciudadanía opine sobre los futuros proyectos, en particular los gremios de arquitectos, geólogos, y ecologistas, para que se tomen en cuenta valores que pueden ser útiles para el convivir local y nacional.

Sobre el proyecto Puerto Santa Ana, sería interesante aprovechar la oportunidad para que se vaya proyectando un gran parque, tal como lo tienen grandes ciudades como Nueva York (parque Central), México (Chapultepec), Quito (La Carolina y El Ejido).

Para el gran parque de Guayaquil puede utilizarse toda el área del Puerto Santa Ana y llegarlo a unir (aunque sea con pasos peatonales) con el actual aeropuerto, que algún día será trasladado hasta la zona del Daular.

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Sería interesante prolongar el malecón Simón Bolívar hacia el norte, construyendo un puente sobre la ría que rodee el cerro Santa Ana y sirva para tránsito liviano, ciclopaseos, y actividades turísticas.

Guayaquil se encuentra en deuda con la niñez, en razón de que los menuditos no tienen su propio parque infantil.

Ing. Gilberto Ramos Lozano
Guayaquil

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Magnífico que Guayaquil siga embelleciéndose con lugares tan atractivos como se ven las fotos de los dibujos de lo que será Puerto Santa Ana.

Pero, ¡ojo, con que resulte después ser un sitio solo exclusivo!, como se ha informado en la prensa; al igual que tantos mall modernos donde una simple humita pequeña la venden a $ 2, o una tajada de torta a $ 2,50, y un padre de clase media no puede invitar ahí a comer a todos sus hijos, porque le resulta caro; y eso que me refiero a quioscos en pasillos. Ni decir de intentar entrar a un restaurante ahí.

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Pena y decepción nos daría que la clase media y los pobres solo vayamos a pasear por fuera y ver solo de lejos los locales y servicios de un proyecto del que no podamos disfrutar, por sus onerosos precios.

Carla Pincay
Guayaquil

Con mucho asombro y preocupación he visto el anuncio del inicio de la impresionante obra Puerto Santa Ana. ¿Cuándo hubiéramos visto, ni en sueños, eso en el país, y ni qué decir en nuestra Guayaquil?

Obra que se desarrollará en 4 hectáreas, con una decena de edificios, restaurantes, hoteles,  y todo lo necesario para que turistas y los que tienen dinero suficiente puedan disfrutar de ese sector.

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Tendrá una inversión de $ 15’000.000. ¿Estamos en capacidad de gastar tanto para que pequeños grupos se den lujos? ¿Se está fantaseando con el 25% de Impuesto a la Renta que aportamos los empleados, que no permite ver más allá? ¿No han visto hospitales, escuelas, barrios suburbanos y sus habitantes en las condiciones que viven? Sin hablar de seguridad, etcétera.

En el orden de prioridades, ¿en qué lugar se encuentran las necesidades básicas de los ciudadanos? ¿Interesan más el turismo y los réditos que genere, y nada lo que pase con los que viven en los alrededores de la ciudad?

¿Es más importante que se diga que Guayaquil tiene una copia del Coco Walk o Coconut Grove de Miami, a que se diga que tiene la mejor infraestructura de América para atender las necesidades primordiales de sus habitantes? ¿Cuántos hospitales, guarderías se pueden construir, o a cuántos niños desamparados se les puede salvar la vida dándoles medicina y comida?

Esperemos que cuando se decidan atender a los necesitados, estos no reciban obras en las frías lápidas de sus tumbas.

Ab. Hólger Álava Heredia
Guayaquil