El ministro ecuatoriano de Ambiente, Fabián  Valdivieso, llamó este miércoles a la comunidad internacional a crear un fondo de  cerca de 100 millones de dólares en cinco años para preservar y desarrollar las  Islas Galápagos y abandonar la actual "mentalidad de apagar incendios". 
 
"Estamos liderando una propuesta que ha sido muy bien aceptada a nivel  internacional: generar un fondo que tenga como objetivo la sustentabilidad de  los procesos en Galápagos", declaró Valdivieso en un encuentro con periodistas  en Washington, donde se encuentra de visita. 
 
Las autoridades ecuatorianas planean presentar su plan para el archipiélago  en una reunión de "alto nivel" que se celebraría a principios del próximo año y  contaría con la presencia de organizaciones como la ONU, el Banco  Interamericano de Desarrollo (BID) y el Centro Carter, así como "países  amigos". 
 
En esa cumbre "se aprobaría el diseño de un plan de desarrollo  sustentable", realizando luego "una mesa de donantes" hacia mediados de 2005  para lograr "la consecución de los fondos", detalló. 
 
Valdivieso recordó que la cooperación internacional otorgó a su país 64  millones de dólares en los últimos cinco años. Los recursos que espera para  realizar su plan "serían más y mejor dirigidos", y podrían elevarse a cerca de  100 millones de dólares en cinco años. 
 
El proyecto del gobierno tendrá en cuenta "las dos caras" de las islas: la  preservación de la riqueza ecológica del archipiélago, patrimonio mundial de la  Humanidad, y el desarrollo para que sus habitantes "puedan favorecerse de las  ventajas de participar en ese mundo privilegiado", dijo. 
 
"Queremos cambiar la mentalidad respecto a las Islas Galápagos que ha sido,  hasta aquí, una mentalidad de bombero, de apagar incendios", declaró. "Queremos  un diseño de política y de trabajo de largo plazo", agregó. 
 
Para lograrlo, "tenemos claro que es indispensable una visión que compagine  y trate de lograr el equilibrio entre la conservación y el desarrollo humano",  aseguró Valdivieso. 
 
La propuesta fue "bien recibida" por el secretario general de la ONU, Kofi  Annan; el presidente del BID, Enrique Iglesias; y por países como España,  Alemania, Gran Bretaña y Estados Unidos, afirmó. 
 
El ex presidente estadounidense Jimmy Carter, que se reunirá el jueves en  Atlanta (sureste de EEUU) con Valdivieso también manifestó su interés por  "cooperar tras su reciente viaje a las Galápagos". 
 
La participación del Centro Carter en el proceso se debe a "su poder de  convocatoria" y "su experiencia en solución de conflictos", explicó el ministro  ecuatoriano, que reconoció "la existencia de una alta conflictividad interna en  las Galápagos". 
 
Por ese motivo, el apoyo internacional debe tener en cuenta las necesidades  de los habitantes. "Agradecemos (el apoyo internacional) para la conservación  en Galápagos, pero queremos también que nos ayuden al desarrollo social, a  comprometer a la gente en los procesos", sostuvo. 
 
El objetivo es que "cada galapagueño sea un guardaparque, que esté  comprometido con las Galápagos y comprenda que es su gallina de los huevos de  oro, a la que no hay que matar", subrayó. 
 
Según las cifras del ministro, 100.000 turistas viajan cada año al  archipiélago, donde viven cerca de 1.000 pescadores. 
 
El turismo aporta 130 millones de dólares anuales al país y la pesca  permite generar ingresos importantes, gracias principalmente al pepino de mar,  una especie muy buscada por coreanos y chinos que puede venderse por hasta 200  o 300 dólares/kg en Asia.