El brutal death metal de Masacre llegó a Guayaquil

Después del frustrado concierto de Cradle of Filth en la ciudad de Quito, la comunidad guayaquileña de rock extremo acampada en el circuito underground (subterráneo) del death metal, sació toda la adrenalina acumulada con el recital que dieron los colombianos de Masacre el sábado pasado en el coliseo de voleibol F.D.G., junto al estadio Modelo.

El concierto estuvo programado a las 15h00, pero por problemas técnicos en la ecualización del sonido hubo un retraso de cuatro horas. En la explanada del coliseo se concentraron centenares de ‘camisetas negras’, en su mayoría incrédulos, debido a la incertidumbre generada por la no presentación de Cradle of Filth. Sin embargo, se abrieron las puertas a las 19h00. Masacre sí se presentaría y la gente entró al coliseo.

Los colombianos estuvieron muy accesibles a su público, firmaron autógrafos –algunos en los senos de sus fans–, brindaron algunos tragos, intercambiaron mails y enamoraron a varias chicas.

Ya todo en orden, empieza una continua descarga de potente death metal en manos de los grupos Skhaton (Quito), Legión (Portoviejo), Necroninfomaniasis y Terrorific Morbus de Guayaquil.

La ejecución del grupo de black metal Legión fue la más destacada. Como introducción, Wacho, guitarrista, y Dover, vocalista, dieron una performance de piromanía (bocanadas de fuego) con unas antorchas. También estrenaron diseños de war paint (caras pintadas).

El repertorio de su demotape El ocaso de la luz ocasionó un enérgico ‘pogo’. Los Legión vuelven a escena después de un obligado ‘break’.

Llega el turno de los Masacre y la gran tribu urbana presente se exalta al oír el tema de culto, Cortejo fúnebre, un verdadero clásico de los colombianos, extraído de la placa Réquiem.

El repertorio continúa con Prepárate a morir del CD  Muerte verdadera muerte, y Álex Oquendo grita: “…yo quiero llevarme la imagen de sus p... cabezas”.

Los colombianos durante su presentación, que duró más de una hora, mostraron todo el material de su nuevo compacto Total death y los temas más representativos de sus trabajos anteriores.

Masacre nace en la ciudad de Medellín (Colombia) en 1988, como una respuesta ante el violento ambiente urbano colombiano, agobiado por las drogas, delincuencia, muerte y corrupción.

Sus primeros integrantes fueron Juan Carlos Gómez y Antonio Guerrero (guitarras), Mauricio Montoya (batería) y Álex “Trapeator” Oquendo (vocales & screams).

Como toda banda nacida en el underground sudamericano, sus primeras grabaciones fueron producidas en estudios improvisados de bajo presupuesto y limitaciones de sonido.
Estos trabajos fueron impresos en maquetas de vinil y casetes. Hoy en día estas primeras grabaciones originales son verdaderas piezas de colección, por su difícil acceso.

“Nosotros nacimos como una banda brutal, en nuestros inicios no contábamos con una base musical bien estructurada, pero poco a poco la fuimos adquiriendo, con la constancia de estos 16 años y así hemos logrado asentarnos como representantes sudamericanos del death metal a nivel mundial”, dice Wacho, el guitarrista.

En 1991 ingresa como nuevo baterista Mauricio Montoya y editan su primer CD titulado Réquiem producido por el sello francés Osmose Récords, el cual logra vender más de 20.000 copias. Luego, en 1993, bajo su propio sello Mórbida Productions imprimen el EP Barbarie y sangre en memoria de Cristo. La carátula refleja una obra del pintor español Juan de Flandes, quien fue llevado a la hoguera por pintar de una forma muy personal la religión católica.

El segundo CD, Sacro lanzado en 1995, los trajo por primera vez a Ecuador y se presentaron en la ciudad de Quito.

“Este concierto fue la mejor experiencia al dar la primera presentación fuera de nuestra Colombia; al llegar a este país hermano no nos imaginábamos el alto nivel de aceptación por parte de un público tan grande”.

Masacre se da un lapso de seis años para publicar su tercer CD, cuya carátula fue censurada por la ilustración del escudo de Colombia en decadencia. Con esta producción vuelven a presentarse en Quito con la gira “Death Truly Tour”.

“Tuvimos problemas al ilustrar un símbolo patrio de la manera que nosotros vemos a nuestro país, carcomido por la violencia, muerte, corrupción, delincuencia y drogas, mucha gente se sintió ofendida”, dicen. Ahora, bajo la mano de Erik Rutan (ex Morbid Angel) como productor, graban su último CD, Total Death en Mana Recording Studios en Tampa-Florida (EE.UU.).

“Hubo una creación más profunda de lo que es ahora nuestra temática y la lírica con el cambio del idioma, pues nuestro nuevo disco Total Death está escrito y cantado en inglés”, declara Álex Oquendo, vocalista y líder de Masacre.

El grupo  está integrado por Jorge Londoño en la guitarra, Álvaro Álvarez en el bajo, Wilson Enao en la batería, Álex Oquendo en las vocales.

La página web oficial de esta banda de música es: www.masacre.cjb.net donde se puede bajar su música en formato mp3, fotos y vídeos.