Enrique Pita, vocal del TEG, reconoció que hubo exceso de Juntas Receptoras del Voto.

Las autoridades de la Facultad de Economía de la Universidad de Guayaquil anunciaron ayer que no volverán a facilitar sus aulas para un evento electoral, tras los problemas registrados el pasado domingo, cuando una muchedumbre pugnaba por ingresar y otra por salir de ese recinto perteneciente a la parroquia Tarqui.

“Fue algo espantoso”. Así describe Clotilde Gordillo, jefa administrativa de la facultad, a lo sucedido el día de las elecciones seccionales. En ese lugar se agolparon cientos de personas que habían sido ubicadas por el Tribunal Supremo Electoral para sufragar allí, pero a última hora sus 117 Juntas Receptoras del Voto (JRV) fueron cambiadas a la escuela Emilio Clemente Huerta (Piedrahíta y Tulcán), lo que finalmente motivó el caos.

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“Estuvo en peligro la vida de las personas”, dice Gordillo. Por ese motivo –indicó– en el futuro esta facultad será cedida solo en sus áreas externas, para precautelar la vida.

Y es que las aglomeraciones se produjeron porque los pasillos, escaleras y aulas resultaron estrechos para albergar a los electores (ver infografía).

A esto se suma que de las tres puertas principales de ingreso solo se abrió una, tal como lo certificó Gordillo, quien señaló que pidió a los militares encargados de la seguridad de este recinto que las abrieran todas, pero eso no fue acogido, “para precautelar la seguridad de las juntas”, según le dijeron.

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En la facultad siempre hubo 55 mesas pero en esta ocasión fueron 81, esto originó que en cada aula se ubicaran de tres a cinco JRV,  a diferencia de otros años en que   solo había dos por aula.

La votación dejó pérdidas en la facultad por más de 2 mil dólares. Hubo daños en más de 16 bancas, mesas, pisos y manchas en las paredes. “Estos costos los asumiremos porque el Tribunal nunca nos paga por daños”.

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Arístides Antepara Erazo, director de Obras Universitarias, señaló que los patios de la ciudadela universitaria prestan facilidades como recinto electoral, pero reconoció que dentro de las aulas no debería ubicarse las JRV “por estrechez y falta de ventilación”.

Enrique Pita, vocal del Tribunal Electoral del Guayas y coordinador de la parroquia Tarqui, reconoció que la votación en recintos cerrados sí provoca inconvenientes entre los electores, por lo que sugirió que se podría analizar la decisión del máximo organismo electoral para que nuevamente se permita el uso de calles como recintos electorales.

Explicó que el problema en la referida facultad se produjo porque hubo un “lamentable exceso” de JRV, debido a que es el último recinto y allí se acumularon los excedentes de los otros recintos. “Por eso hubo que pasar más de 100 juntas a una escuela”, añadió.

ELECCIONES

JUNTAS
En la Facultad de Economía se instalaron las juntas 725 a 767 (hombres) y 757 a 794 (mujeres). 16.200 personas debían votar allí.

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OPINIÓN
El decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, Jorge Cabello, considera que la Ciudadela Universitaria es apta para funcionar como recinto electoral, pero los incidentes fueron “por desorganización del Tribunal Electoral del Guayas”.

PLANTA BAJA
A su juicio hay suficiente espacio para instalar las juntas  del voto en la planta baja, por lo que se evitaría riesgos si no son asignadas en pisos altos.

RECINTOS
La parroquia Tarqui está compuesta por los recintos electorales de las universidades Laica y Estatal y los colegios Aguirre Abad y Simón Bolívar.