Reclamos, súplicas y empujones fueron ayer la tónica en las afueras de las oficinas del Ministerio de Bienestar Social (MBS) en Quito. Cientos de personas de escasos recursos se acercaron ayer con la esperanza de recibir los víveres y juguetes que entrega esa cartera de Estado en fundas promocionales del Gobierno.

Imelda Chamorro viajó desde Calacalí, parroquia rural de Quito, para esperar durante dos horas por las raciones.

Las puertas del Ministerio se abrieron con intervalos de dos horas para dejar pasar a grupos de unas 500 personas que debían bajar al parqueadero de la institución, donde les entregaban un juguete y una funda de caramelos.

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Paulina Villacrés, moradora del sur de Quito, acudió con sus dos hijos y denunció maltrato por parte de los funcionarios del MBS, por el largo tiempo de espera y la aglomeración al momento de ingresar al estacionamiento.

El auditorio del Ministerio estaba convertido en un depósito de juguetes de procedencia china, que eran empacados por los burócratas en bolsas negras. Además de muñecas, carros y llaveros, el MBS entregó “yoyos chinos”, cuya venta cuestionó la Tribuna del Consumidor y el Municipio de Quito.

Según la Tribuna, un estudio realizado por la Universidad Autónoma de México estableció que el juguete contiene solventes que se utilizan en la fabricación de pegamento y pintura y pueden provocar intoxicación.

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Bolívar González, subsecretario de Bienestar Social, quien dijo que financia la compra de cuatro millones de juguetes y de las raciones alimenticias, anunció que las donaciones se incrementarán la próxima semana y concluirán en diciembre. Manifestó que no tiene que rendir cuentas respecto de las donaciones, porque se trata de un asunto personal.

Aceptó que solicitó la elaboración de un sello con los nombres del presidente, Lucio Gutiérrez, y del ministro de Bienestar Social, Antonio Vargas, para pegarlos en los cuatro millones de juguetes.

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González señaló que ese Ministerio abrió una oficina en Galápagos con la finalidad de entregar también allí juguetes y 5.000 raciones alimenticias.