Al gendarme lo encontraron con un disparo en la sien izquierda. Sus familiares dicen que se suicidó.

El suboficial segundo de la Policía Nacional, Víctor Eusebio Valencia Castro, de 52 años, fue encontrado ayer muerto con un disparo en la cabeza  en el baño de uno de los dormitorios del Comando de Policía del Guayas (cuartel Modelo).

El hecho ocurrió aproximadamente a las 06h45, mientras el personal de oficiales y miembros de la tropa policial se formaban en el patio de la institución antes de salir a patrullar.

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Casi media hora después llegaron los agentes de la Brigada de Homicidios, quienes ingresaron al baño del cuartel para realizar el levantamiento del cadáver. En el lugar estaban los compañeros de Valencia, quienes se percataron del hecho cuando volvieron a los dormitorios para ver qué había impedido al uniformado acudir al acto.

“Esto es realmente una sorpresa para nosotros, cuando estábamos regresando de la formación nos alertaron porque habían encontrado a mi suboficial Valencia en un baño sobre un charco de sangre. Nos pidieron que llamemos a una ambulancia, pero fue demasiado tarde”, sostuvo uno de sus compañeros, quien prefirió no identificarse.

Familiares del uniformado arribaron al recinto policial, desconcertados por la noticia que recibieron vía telefónica sobre la muerte del suboficial.

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Reyna Valencia, hermana del fallecido, manifestó que a ella la llamaron para notificarle que el suboficial se había disparado en la cabeza. “Cuando nos avisaron, nos dijeron que mi hermano se había disparado él mismo, más nada”, indicó.

“La noche anterior (miércoles) llegó a la casa un poco bebido por una reunión que tuvo, pero no pensamos que iba a hacer esto”, agregó.

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Asimismo, otros familiares de Valencia indicaron que el suboficial enfrentaba un juicio en la Corte Policial por la pérdida de un arma, hace varios años (no especificaron cuántos), por lo que no podía pedir la baja voluntaria de la institución y esta situación lo tenía muy preocupado.

“Cuando tuvo el percance de la pérdida del revólver, él lo pagó y no se supo más sobre ese asunto. No es posible que por un arma a un policía se le ponga un juicio y no se le permita retirarse luego de tantos años de servicio”, reclamó Rosa Valencia, hija del gendarme.

Valencia tenía 30 años de servicio en la institución y estaba encargado de la patrulla antimotines de la Policía en Guayaquil.

El jefe del IV Distrito de Policía, general Bolívar Cisneros Galarza, manifestó ayer que aparentemente la muerte del sub-oficial Valencia fue un suicidio.

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Cisneros mencionó que personal policial realiza las investigaciones en torno al deceso del uniformado.

Referente al juicio al que Valencia estaba sometido por la pérdida del arma, el oficial dijo no tener conocimiento del asunto.

Familiares, compañeros y vecinos se hicieron presentes en el funeral de Valencia, que se realizó en el domicilio, ubicado en las calles Nicolás Segovia y la G (sector del Cristo del Consuelo).