Los glaciares de Ecuador se reducen aceleradamente por el calentamiento global al punto que la superficie cubierta por hielo en el volcán Cotopaxi, uno de los más altos del país, se redujo en un 31 por ciento entre 1976 y 1997, reveló el miércoles un informe.
 
El Cotopaxi, con 5.897 metros, es uno de los volcanes más activos del mundo y por su altura está cubierto por una imponente masa de hielo, lo que le convierte en un reto para los amantes de deportes extremos y en una joya para el sector ecoturístico del país.
 
El volcán, cuya última erupción se produjo en 1877, es una de las víctimas del cambio climático producto principalmente del consumo de combustibles fósiles y del aumento de los gases que producen el efecto invernadero, como el dióxido de carbono (CO2), según los expertos.
 
El área del glaciar en el Cotopaxi pasó de 21,2 a 14,6 kilómetros cuadrados entre 1976 y 1997, según un informe del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo de Francia (IRD) y organismos ecuatorianos, como el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (INAMHI).
 
La superficie del glaciar incluso habría caído hasta los 13,9 kilómetros cuadrados en el 2003, según reportes preliminares.
 
La situación sería más aguda en otras montañas de Ecuador, por lo que en un lapso de entre 10 y 20 años el país perdería al menos a cuatro de sus ocho glaciares más importantes y que atraen anualmente a miles de turistas, según los científicos.
 
"Observamos una pérdida y el promedio de la pérdida (en el grosor de los glaciares en Ecuador) es de medio metro por año", dijo a Reuters el glaciólogo Bernard Francou del IRD, quien atribuyó directamente el fenómeno a la subida de las temperaturas mundiales.
 
La desaparición de los glaciares -importantes reguladores climáticos- provocaría daños en los ecosistemas ecuatorianos y problemas en el abastecimiento de agua para sus principales ciudades, incluida su capital, Quito, que depende en un 80 por ciento de recursos hídricos alimentados por los nevados.
 
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) proyecta que las temperaturas promedio subirán en 1,4 a 5,8 grados Celsius para el 2100 a causa del impacto humano sobre el clima.
 
Las temperaturas ya han subido 0,8 grados Celsius desde la Revolución Industrial, a la par de un incremento del 30 por ciento en los niveles de CO2.