Arabia Saudita dijo el domingo que deportará a cualquier extranjero que coma, beba o fume en público entre el amanecer y la puesta de sol durante el mes sagrado para los musulmanes del Ramadán.
 
En otro comunicado, funcionarios también pidieron a todos los musulmanes en Arabia Saudita -que alberga los santos lugares del Islam-, que presten atención el miércoles en la tarde a la luna nueva que marcará el comienzo del mes lunar.
 
El Ramadán es el mes más sagrado del calendario musulmán, cuando los practicantes no toman comida ni agua ni mantienen relaciones sexuales entre el amanecer y el anochecer.
 
"Los residentes no musulmanes deben respetar los sentimientos de los musulmanes no comiendo, bebiendo o fumando en lugares públicos, calles o lugares de trabajo", indicó el ministro del Interior en un comunicado.
 
"Si alguien no cumple estos procedimientos, el ministerio utilizará su derecho a (...) deportarle del reino", añadió.