Colegio Spellman se unió a la celebración octubrina

Comida típica, música y exposiciones en el festival
de estampas guayaquileñas.

Costumbres y tradiciones del Guayaquil antiguo fue lo que se revivió ayer en los patios del colegio bilingüe Cardenal Spellman.

El acto, denominado Estampas de la ciudad, se inició a las 09h00 y culminó a las 12h00. Participaron 80 estudiantes de las especialidades de físico matemático, química, informática y ciencias sociales.

Entre las exposiciones de los alumnos se destacó la presentación de los lagarteros, los antiguos lavaderos de ropa, las trabajadores sexuales de la calle Machala, los tapahuecos, entre otros.

En esta última presentación se vio muy atenta a Adriana Robles de Sandoval, de 53 años, quien observó cómo dos estudiantes de cuarto de informática explicaban el uso de los antiguos tapahuecos. El estudiante Kléber García aseguró que hace más de 30 años en un tarro de pintura se encendía carbón y se colocaba el cautil (barra de hierro), “para luego proceder a derretir el estaño y poder tapar los huecos de todos los utensilios de cocina”.

Mientras esto ocurría, en el centro del patio del colegio hubo presentaciones de bailes folklóricos.

Un salonero diferente

Se confundía entre las casi 300 personas que asistieron al colegio. Vestía un atuendo de épocas pasadas y llevaba un charol con muchines para ofrecerlos al público.  Se trata del rector del plantel, Ángel Quiñónez, quien hace 30 años viene organizando esta clase de eventos en el centro educativo que funciona hace 43 años.

El rector invitaba a los padres de familia y a los asistentes a que se deleitaran de las comidas típicas como arroz con cangrejo, pollo, patacones, arroz con leche, café de grano, entre otros platos de la gastronomía  guayaquileña que se vendieron en el festival estudiantil, ayer.