A primera vista la cabecera cantonal de Durán parece sometida a trabajos de reconstrucción, los que le han dado una nueva imagen a la urbe pero que, sin embargo, no le han permitido superar el mayor problema que padece esta ciudad asentada entre los ríos Babahoyo y Guayas: un normal suministro de agua potable.

En las vías de ingreso y calles interiores la maquinaria municipal trabaja en distintos sectores en asfaltado de calles, construcción de parques y canchas deportivas; las obras más visibles de la administración de la alcaldesa Mariana Mendieta de Narváez, quien busca la reelección con el apoyo del Partido Social Cristiano (PSC).

Grupos de ciudadanos destacan que la obra transformó sitios insalubres y abandonados en lugares de esparcimiento y deporte.

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“Aquí había un canal de aguas lluvias que en verano se convertía en basurero; el Municipio le dio otra imagen al construir sobre este sitio parques y canchas”, señaló Julieta Navarrete, moradora de la ciudadela Primavera 2.

También en los sectores urbano marginales de la cabecera cantonal como las ciudadelas del Secap y El Arbolito el acceso mejoró con el asfaltado de calles.

Agua potable
Sin embargo, la obra que mereció una página del plan de gobierno de la alcaldesa y que no pudo concretar por la falta de recursos es el nuevo sistema de agua potable.

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La funcionaria aclaró que se realizan los estudios del nuevo sistema que será financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), aunque no reveló el costo del proyecto.

“Solo el 35% de los 400 mil habitantes del cantón se benefician del actual sistema de agua”, admitió Mendieta.

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La escasez de agua afecta especialmente a los habitantes de la ciudadela El Recreo, declarada parroquia urbana de Durán, quienes deben instalar conexiones clandestinas para obtener el líquido.

“El agua nos llega a veces cada dos días y no siempre se la puede utilizar porque viene sucia y con mal olor”, dijo José Sarmiento, residente de esta ciudadela.

Marianita, como se la conoce a la Alcaldesa, indica que el problema fue darle El Recreo a  Durán sin planificación, sin agua, sin botadero de basura ni canalización. “A mí me ha tocado ese reto tan fuerte, allí viven 100 mil personas”, dijo.

El comerciante Gustavo Medina señaló que aunque la obra sea cara y requiera de créditos externos, ésta debe ser una prioridad para las autoridades municipales.

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PRÓXIMA ENTREGA: CANTÓN SAMBORONDÓN