La vacancia y reemplazo en el cargo de secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA) se puede dar por tres vías.

La primera es por renuncia, caso en el que asume interinamente el secretario general adjunto, Luigi Einaudi, de EE.UU., hasta que la Asamblea General, conformada por los cancilleres, elija a un nuevo titular por un periodo completo.

Otras alternativas son la reunión de emergencia de la Asamblea General de la OEA, pedida por dos tercios de los países miembros (23 cancilleres de 34), o por una reunión de consulta, solicitada por un solo miembro.

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En ambos casos se necesitará las dos terceras partes (23 de 34) de votos en contra para destituir al secretario general, así como para nombrar al nuevo funcionario.

La Carta de la OEA no menciona las causas de destitución en detalle y solo dice que el secretario general de la OEA no puede actuar en forma incompatible con su condición de ser un funcionario a nivel internacional.