Cuatro ataques con coche bomba dejaron ayer un  saldo de por lo menos 20 muertos en Iraq, mientras el ejército de EE.UU. continuaba sus operaciones contra la resistencia iraquí en la ciudad de Faluja.

Un grupo extremista liberó a dos indonesias secuestradas y el cadáver decapitado de un iraquí que trabajaba para EE.UU.  se lo encontró en una vía  al oeste de Kirkuk.