Cerca de 5.000 familias que viven de la pesca piden la construcción de un muelle para proteger sus naves.

Desde hace más de diez años los pescadores del sitio Los Arenales, en la parroquia Crucita, piden a las autoridades la construcción de un muelle artesanal para resguardar sus embarcaciones.

Según Manuel Mero, segundo vocal de la Cooperativa Artesanal  Los Arenales, los pescadores necesitan que se construya el muelle para impedir que las olas rompan en la orilla de la playa donde  permanecen 200 pangas.

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Además para que las naves que vienen de pescar puedan acoderar sin inconvenientes y, para dar trabajo a grupos de cargadores que se encargarían de bajar los productos de las naves al muelle.

Según ellos pese a que ya se han elaborado los estudios no hay los recursos económicos para que se ejecute esa obra.

Alrededor de 5.000 familias que viven en las inmediaciones de esta comunidad portovejense han solicitado al Municipio, Marina y Consejo Provincial que construya el muelle, pero todavía no han obtenido respuesta.

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Según Mero en las comunidades Los Ranchos, Los Arenales, Las Gilces, entre otras situadas en la parroquia Crucita, sus habitantes viven de la pesca, y  es por ello que siempre han pedido la construcción del muelle artesanal.

“Se van en puras promesas, y hasta ahora no hay nada; al parecer para las autoridades solo existe el centro de Crucita, y las otras comunidades no existimos porque acá nunca se ha hecho obras, y cuando nos hemos acercado hasta la Empresa Municipal de Turismo (Crucitur) o hasta el Municipio las autoridades hacen caso omiso a nuestros pedidos”, dijo el pescador.

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Surtidor de combustible

Los pescadores de Crucita anotan que también han solicitado a la Dirección de Hidrocarburos la instalación de un surtidor de gasolina artesanal para abastecerse del producto, ya que actualmente deben viajar hasta la ciudad de Manta para conseguirla.

Los pescadores sostienen que la adquisición es semanal, y que cada panga consume 20 galones de gasolina (cada galón cuesta $ 26), pero si el lugar donde se va a pescar es lejano, se consume más.

Además indicaron, a través de su dirigente, que la cooperativa ha gestionado la instalación del surtidor y que solo esperan la respuesta de la Dirección de Hidrocarburos para que llegue el servicio.

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“Así ya no viajaremos a Manta por ese combustible, y tendremos nuestro propio surtidor”, refirió.

Estudios

Yuri Alcívar, presidente de la Junta Parroquial de Crucita, señaló que el pasado 24 de junio, cuando se celebró un aniversario más de la parroquialización de esta localidad, el Municipio de Portoviejo recibió los estudios para la construcción de un rompeolas y del muelle artesanal.

Según Alcívar, después de algunos días estos fueron retirados de las oficinas de Crucitur a donde habían sido entregados, porque “estaban incompletos”.

El presidente de la Junta Parroquial señaló que lo poco que conoció de esta obra es que cuesta 10 millones de dólares, y que el rompeolas tendrá cerca de 650 metros de longitud; mientras que el muelle artesanal será de 400 metros.

Alcívar dijo que para financiar esta obra, se puede buscar ayuda de organismos internacionales o con las propias instituciones provinciales.

Actualmente, sostuvo Alcívar, la Junta Parroquial no cuenta con recursos para ejecutar obras, ya que lo que percibe del Municipio, se utiliza en pago del personal que labora en el mismo.

“Hemos logrado realizar un proyecto integral de desarrollo para Crucita a través del Fondo Populorum Progreso, pero eso no es suficiente, la parroquia requiere de alcantarillado sanitario y pluvial y del servicio de agua potable”, manifestó.