A 13 subió cifra de muertos por el accidente de un bus en Cañar

En el percance perecieron ocho hombres y cinco mujeres. Otras trece personas resultaron heridas.

La cifra de fallecidos a consecuencia del accidente del bus de la cooperativa Santa, que se volcó a la entrada de la parroquia Honorato Vásquez del cantón Cañar, en la provincia del mismo nombre, se incrementó ayer a trece.

El percance, que ocurrió el pasado lunes a las 22h45, reportó inicialmente doce fallecidos, pero ayer se confirmó la muerte de una de las catorce personas que resultaron heridas. Ella es Silvia Ramos Caiza, de 17 años, cuyo cadáver fue retirado de la morgue de Cuenca.

Mientras su madre Luz María Caiza permanece hospitalizada, los restos de la joven fueron trasladados a Ambato, donde serán velados junto con los de su abuela Luz María Ramos López (65), quien también falleció en el accidente del autobús que cubría la ruta Loja-Quito.

Las escenas de dolor entre los familiares de las víctimas se multiplicaron ayer. Una de las heridas, Marcia Cuenca, quien fue dada de alta del hospital Homero Castanier, de Azogues, acudió a la morgue de Cañar junto con sus hijas, Verónica y Daniela Ordóñez, quienes también resultaron afectadas, a recoger el cadáver de su esposo Wilson Ordóñez, para llevarlo a la parroquia La Merced en Loja, donde iba a ser velado y luego sepultado.

Cuenca explicó que su esposo fue reconocido por un familiar que identificó el tatuaje de un águila en el brazo derecho de su marido.

La tragedia fue aún mayor cuando el menor Fernando Quiroga Cárdenas (8), quien está asilado en el hospital Vicente Corral Moscoso, de Cuenca, supo que sus padres José Quiroga y Marcia Cárdenas fallecieron a consecuencia del percance.

El pequeño sufrió la amputación de su mano derecha y pie izquierdo por la fuerza del impacto, ya que el bus de Santa dio dos vueltas de campana y perdió el techo por tratar de rebasar en una curva a otro autobús.

“¿Por qué a ellos, qué me hago sin mi papito y sin mi mamita, sin mi mano y sin pierna”, preguntaba ayer el pequeño Fernando a la vez que lloraba desconsoladamente.

El niño está a cargo de su abuela, Mariana Quiroga, quien no pudo contener las lágrimas al ver su reacción. “Mamita Mariana, me dijiste que mis papis estaban en Ambato”, cuestionó el pequeño.

El jefe del área de Pediatría, Jorge Montalvo, explicó que las condiciones de salud del menor “están más o menos aceptables”, pero que deberá someterse a tratamiento psicológico para recuperarse emocionalmente de la pérdida de sus padres.

Montalvo indicó que las partes amputadas del chico fueron entregadas a la morgue del hospital y que ya no podrán ser reimplantadas por la falta de equipos y especialistas.

VÍCTIMAS

MUERTOS
Son trece los fallecidos: Los esposos José Armando Quiroga (38) y Marcia Cárdenas (31);  Marcelo Pablo Villacís (50),  Segundo Logacho Vasco (36), Eudoro Mizhquiro, Jenny  Yugcha Paredes (22), Alejandrina Morales (53), Luis Ernesto Dilon (31), José Luis Morocho Allauca (23); Luz María Ramos López (65) y su nieta Silvia Ramos Caiza (17); Wilson Ordóñez y Lizandro Alejandro López Aguilar. De estos dos últimos no se especificó sus edades.

HERIDOS
Son trece: Marcia Cuenca Urgilés, Luz María Caiza Ramos (41), hija de la fallecida Luz María Ramos; Rosa Mercedes Peña Merino (27), Víctor Uyaguari (45), Édison Pérez Brito, René Costa Zarango, Milton Merchán, Joel Romero Paredes (2), hijo de la fallecida Jenny Yugcha; las hermanas Daniela y Victoria Ordóñez Cuenca, de 3 y 1, respectivamente; y Joseph Quiroga Cárdenas (8), quien perdió a sus padres José Quiroga y Marcia Cárdenas. Los otros dos afectados aún no han sido reconocidos porque se encuentran en el área de terapia intensiva.