Los azules tuvieron una temporada llena de altibajos en su fútbol, junto a los cambios de DT  y atrasos en sueldos que derivaron en la crisis.

Los largos 13 años de ininterrumpidas participaciones  en la disputa por el título de campeón del  fútbol llegaron a su fin la tarde del pasado domingo para Emelec. En ese tiempo (1990 al 2003) los azules consiguieron cuatro títulos (dos bicampeonatos), subtítulos y seis clasificaciones en Copa Libertadores de América.

“El peor castigo para los jugadores de Emelec y su dirigencia es no haber clasificado a la liguilla para disputar el título. Esto les servirá para un análisis profundo  porque es un club grande”, dijo Carlos Torres Garcés, ex jugador y técnico de los eléctricos, quien además no se siente impresionado por la crítica situación futbolística que atraviesa el tradicional club del astillero.

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El ex entrenador de la selección de Ecuador señaló  que es natural que equipos como Emelec tengan un descenso en su producción de fútbol, lo que deriva en resultados negativos.

“No hay proceso gastado en Emelec, los “extraterrestres”, algunos de ellos, son realidad. Primero deben tranquilizarse jugadores y dirigentes y planificar bien el trabajo del próximo año”, agregó.

Como materia de análisis abordó Torres Garcés  la tardanza para elegir la nueva dirigencia de los emelecistas, a la que culpó como el inicio de una temporada llena de problemas en el que los constantes cambios de cuerpo técnico  y las deudas con algunos jugadores le dieron el toque de inestabilidad al plantel y de inseguridad en la fanaticada.

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Jorge Arosemena, presidente azul, comentó después de la derrota 7-1 ante Deportivo Quito, que analizará la continuidad del técnico  Dusan Draskovic.

Carlos Raffo, ex jugador y gloria de Emelec, coincide con Torres Garcés en que los cambios de entrenadores “fueron mortales y terminaron eliminando a los eléctricos del torneo nacional”.

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“El equipo siempre ha tenido entrenadores argentinos o uruguayos y yo creo que le falta un entrenador de esa misma línea. De los partidos que vi de Emelec, se nota que los jugadores les falta garra, aquella con la que se jugaba antes. Los jugadores no tienen amor propio”, aseguró Raffo.

A más de no haber accedido a la fase final del campeonato, Emelec perdió en tres ocasiones en este año contra su “hermano de patio”, Barcelona en los clásicos del astillero. En el estadio Monumental los azules perdieron 2-1 y 2-0, mientras que en el Capwell igualaron a dos y cayeron 3-2.

Para Edwin Villafuerte, arquero de Barcelona, será distinto jugar una liguilla pre Libertadores sin Emelec.

“Se va a extrañar los clásicos, en la gente y en los jugadores porque en las liguillas son finales”, dijo Villafuerte.

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