Leonor Azucena Baquerizo Correa, con cédula de identidad 091573061-8, es profesora de la escuela fiscal Alfonso Reyes –la más antigua de Simón Bolívar– desde el 2003.

El Municipio paga su sueldo (y, por tanto, consta en sus roles de personal) porque el Ministerio de Educación no tiene una partida para parvularias en ese cantón, ubicado a una hora de Guayaquil, sobre la vía a Babahoyo (Los Ríos).

No obstante, ella apareció en las listas de miembros de las Juntas Receptoras del Voto (JRV) elaboradas por el Tribunal Electoral del Guayas (TEG) como empleada de la Constructora Cevallos.

Publicidad

“Ni siquiera sabía que me había tocado estar en una mesa”, expresó ella, mientras pedía a los chicos de su aula bajarse de las ventanas por las cuales espiaban su conversación con este Diario.

Yngri Magali Reinoso Baquerizo y Julio César Dier Aldaz laboran en el área de Tesorería del Municipio, pero el primero constaba como empleado de la empresa Cía Lloyds Register y, la segunda, de CI Global Imports.

Reinoso pensaba –según dijo– que aparecía en las listas de las JRV como empleada del cabildo. Ella labora en ese sitio desde el 2000: la contrató el alcalde con licencia, Johnny Firmat (socialcristiano), quien busca la reelección.

Publicidad

La semana pasada, el vicepresidente del TEG, Roberto Ponce (Prian), denunció la alteración de los nombres de empleados de al menos 40 empresas privadas y públicas que enviaron sus nóminas al TEG; en su lugar, dijo, aparecieron trabajadores municipales.
Dicha situación fue detectada en cuatro cantones del Guayas (Simón Bolívar, Yaguachi, Lomas de Sargentillo y La Libertad).

Por ello, el pleno del organismo decidió anular las juntas de 27 cantones (a excepción de Guayaquil), cerrar su centro de cómputo y suspender a sus funcionarios.

Publicidad

El vocal prianista conoció el caso de Simón Bolívar a través del candidato a alcalde de ese cantón por su mismo partido, Hugo Ramos. “Es que en los pueblos pequeños todo el mundo se conoce”, dijo.

Cuando el TEG publicó las listas en los diarios del país, el pasado 14 de septiembre, la gente de la zona se sorprendió.
“Había muchos empleados del Municipio en la nómina”, comentó Ponce.

Dier expresó que la irregularidad pudo ser fraguada por algún partido político interesado en responsabilizar a un tercero. “Lo bueno es que ya no me toca estar en ninguna junta”, dijo.